El filial blanquivioleta visita mañana, a partir de las cinco de la tarde, el campo de El Montecillo para medirse a la Arandina con el objetivó de seguir invicto lejos de Los Anexos
Salida complicada para el Real Valladolid Promesas la de este fin de semana. Los entrenados por Javi Torres Gómez viajan hasta la localidad burgalesa de Aranda de Duero para enfrentarse mañana, a partir de las cinco de la tarde, al tercer clasificado del Grupo VIII de Tercera División, la Arandina.
El filial blanquivioleta que no sabe que es sucumbir lejos de casa quiere seguir con esta dinámica y conseguir un resultado positivo que le permita afianzar aún más el liderato.
Pasan las jornadas y el Promesas no se baja de la primera plaza del Grupo VIII de Tercera División. Todavía más líderes, 57 puntos, tras remontar la semana pasada ante el Cristo Atlético. El filial blanquivioleta que perdía desde el minuto catorce dio la vuelta al resultado en los últimos diez minutos gracias a los tantos de Amaro, Rubén Díaz y Zubi que colocaron el tres a uno definitivo en el marcador.
Poco más se puede contar de un equipo que esta temporada está haciendo las cosas bastante bien. Así lo reflejan sus números; dieciséis victorias (diez en casa y seis fuera), seis empates (todos ellos fuera) y tan solo una derrota (como local en la jornada tres ante el Almazán). A veces con un juego bonito, vistoso y de toque y otras, sin embargo, tocado por la suerte del campeón.
Para este partido Torres Gómez ha citado a los siguientes jugadores: Julio, Facundo, Ruba, Adrián, Iván Casado, Jorge Pesca, Fran No, Alberto, Anuar, Clyde, Keven, Zubi, Teto, Juanjo, Vadillo y Colino.
Se quedan fuera de la convocatoria por lesión Xavi Carmona, Álex, Guilherme y Amaro por lesión. Además de Juanmi, por decisión técnica. Rubén Díaz, por fallecimiento de un familiar, tampoco estará en El Montecillo.
La Arandina ve este partido como transcendental para sus intereses. El de no ver peligrar la tercera plaza, que da derecho a disputar los play-off de ascenso a la División de Bronce, y el de mejor el juego mostrado en los últimos partidos. El pasado sábado los de Pepe Calvo se dejaron remontar un cero a dos a favor en tres minutos ante el Numancia B. Los sorianos igualaron el choque anotando los goles en el 85′ y en el 94′.
Tras un comienzo de temporada dubitativo y donde cosechó resultado inesperados retomó el vuelvo, aunque sus juego y resultados en lo que llevamos de campaña ha ido por rachas, y llega al partido de mañana como tercera con 42 puntos. Un equipo que se hace fuerte en casa donde ha sumado un total de veintiséis puntos. Astorga y Ávila han sido los únicos equipos capaces de ganar en El Montecillo en la presente temporada.
Los de Pepe Clavo necesitan puntuar para que el Real Ávila, cuarto clasificado, y Sociedad Deportiva Almazán, quinto en la tabla, no le roben la tercera plaza. Tanto abulenses como sorianos tienen 41 puntos, tan solo uno menos que la Arandina.
Pepe Calvo, inmerso en dudas respecto al once que saltará mañana al césped de El Montecillo, recupera a dos jugadores muy importantes, David Marcos y David Durántez. El míster del conjunto ribereño reconoció que la presión y la necesidad imperiosa de ganar recae sobre ellos puesto que “el Valladolid B, con doce puntos de ventaja sobre nosotros, puede preparar el partido como quiera”.
El envite de mañana no será fácil para ninguno de los equipos. Ambos desean lo mismo, ascender a Segunda División B. Los vallisoletanos están lanzados y quieren seguir ampliando distancias con el segundo clasificado, el Atlético Astorga, y asegurarse el campeonato cuanto antes para preparar bien la fase de ascenso a la División de Bronce.
Por su parte los burgaleses, a pesar de la irregularidad mostrada en los partidos y en el campeonato, también quieren marcan distancias con sus perseguidores y no ver peligrar su puesto de play off.
El choque de mañana será dirigido por el colegiado Alberto González Hernández que estará auxiliado en banda por Manuel Falagán Herrero y Jesús Esteve Vicente. En el partido de la primera vuelta se impuso el Real Valladolid Promesas por dos goles a uno gracias al doblete de Rubén Díaz.