Tanto el tinerfeño, quien tiene muy complicado su concurso, como el onubense jugaron en el CD Tenerife, donde coincidieron
La cantera canaria es prolija en lo que a jugadores de ataque, diferentes, con chispa, se refiere. También en cuanto a extremos u hombre de banda, como es el caso de nuestros dos protagonistas: Omar Ramos y Alejandro Alfaro. Siendo francos, el segundo se formó en las categorías inferiores del Sevilla, pero sí fue en la isla donde explotó y mostró sus mejores maneras.
Ellos dos, por azares del destino, coincidirán al menos esta campaña en el Real Valladolid y, justamente este domingo, se enfrentarán al equipo que les alumbró en el profesionalismo.
Para Alfaro, no será la primera vez que se enfrente a su querido Tenerife en Segunda. Sin ir más lejos, el año pasado, vistiendo la camiseta del Mallorca, ya tuvo la ocasión de hacerlo. De hecho, en declaraciones para La Opinión de Tenerife, previas al partido de vuelta que se jugó en Son Moix entre estos dos conjuntos la pasada temporada, dijo: «De mis años allí me quedo con todo porque crecí mucho como futbolista y como persona; recibí mucho cariño por parte del club y de la afición. ¿Lo mejor profesionalmente? El ascenso tras una temporada enorme y el derbi, donde tuve la suerte de marcar el tanto de la victoria en Gran Canaria».
El gran afecto que siente por el equipo que le dio sus primeros éxitos es probable que no haya cambiado en tan solo unos meses, con lo que, a buen seguro, para el onubense este partido será especial. Es necesario confirmar, de cara al morbo, que Alfaro no celebraría un hipotético gol ante el conjunto tinerfeño, o así lo manifestó el año pasado en una entrevista a eldorsal.com: “No. Siempre he dicho que le tengo mucho respeto a esa afición. Pasé allí dos años maravillosos y por respeto a ellos no lo haría”.
Sin embargo, para Omar Ramos no parece tan claro que se produzca dicha efeméride. De hecho, el jugador tinerfeño nunca se ha enfrentado a su exequipo, y parecer ser que en esta ocasión, debido a un esguince en el tobillo izquierdo, tampoco lo hará.
El curioso caso de estos dos jugadores, referencia en otros tiempos del conjunto chicharrero, es una paradoja más de las que cada fin de semana nos trae el loco mundo del fútbol. Y para muestra, el último partido de la temporada 2012/13 en Primera División. Aquel en el que el Real Valladolid caía en Son Moix por 4-2; aquel en el que Alejando Alfaro abría la cuenta goleadora del partido y Omar Ramos la cerraba.
