El Real Valladolid Promesas ha sufrido un cambio radical en la vanguardia de cara a la temporada 2014/15, debido a la marcha de Rubén Díaz y a la llegada de Guille Andrés, Sekou o la aparición del juvenil Dani Vega
La pretemporada del Real Valladolid Promesas, que finaliza con la última prueba en forma de final ante el Mojados, en el XXI Trofeo Diputación, ha dejado por ahora un bagaje de una derrota, dos empates y tres victorias. Más allá de los resultados, lo cierto es que con el rodaje de los minutos los jugadores blanquivioletas han ido mejorando a nivel personal y lo que es más importante, a nivel colectivo.
A priori, el olfato goleador que tenía Rubén Díaz se podría haber echado de menos a orillas del Pisuerga. Sin embargo, desde que Guille Andrés marcara su primera diana con la camiseta del Promesas desde el mismo punto de penalti desde el que el granadino anotó su último gol se intuía que los goles no iban a faltar. Y así ha sido en esta pretemporada del Real Valladolid B. De los doce goles que el conjunto vallisoletano ha marcado, la mitad han nacido de las botas de los delanteros que estarán bajo las órdenes de Rubén de la Barrera durante la andadura en la categoría de bronce.
El delantero de Xàtiva acumula trescientos minutos con sus nuevos compañeros, de quienes reconoce que son buenas personas y que el buen ambiente reina entre todos. Sus dos tantos con la elástica blanquivioleta confirman las buenas sensaciones, que se extienden hasta el técnico. «Estamos muy bien con él, sabemos que va a sacar lo mejor de cada uno, nos aprieta y no deja que nos relajemos ni un segundo», reconoce Guille.
Tal y como él mismo explica, la pretemporada ha ido de menos a más amén de que el equipo ha mejorado bastante respecto a las primeras semanas. «Cada vez nos conocemos más entre nosotros y estamos encontrando lo que el entrenador quiere de cada uno», explica, a lo que añade que son «un equipo», palabras que deben ser testadas en competición.
Con los mismos partidos, aunque con cien minutos menos y con unas características completamente diferentes se encuentra el que le acompaña en el ataque, Sekou Gassama. El catalán, que comenzó la pretemporada a las órdenes de Rubi con la primera plantilla, la ha finalizado con quienes serán sus compañeros durante la campaña que comienza este sábado ante el Atlético Astorga. Suyo fue el único tanto en la sufrida victoria ante el Atlético Tordesillas que significaba el pase a la final del Trofeo Diputación y su primer tanto con el filial.
De la Barrera tiene en el ariete de origen senegalés una opción para sacar provecho de los partidos que requieran profundidad y verticalidad, pues es un ‘nueve’ que jugando de espaldas a la portería y protegiendo la pelota permitiría que aparecieran los espacios y llegarán jugadas desde la segunda línea.
Con todo, la vanguardia ha sumado un integrante sorpresa en la pretemporada. El juvenil Dani Vega ha aprovechado al máximo los 170 minutos de que ha dispuesto en cinco partidos distintos. El juvenil ha saltado desde el banquillo al terreno de lo juego en cuatro ocasiones con las ganas de agarrar cada balón y enviarlo al fondo de la red. Y como por hambre no fue, ha ofrecido un buen nivel, en lo individual y al colectivo.
Vega suma tres goles en la pretemporada con el filial, que han servido para vencer al Numancia B, gracias a su doblete, para ampliar la goleada ante el Rueda en los cuartos de final del Trofeo Diputación y para que De la Barrera sepa que, si en algún momento lo requiere, también puede contar.
