La liga sueca, Allsvenskan, ha contemplado en un mismo terreno de juego a dos futbolistas que, desde hoy, coinciden en el Real Valladolid: Valdet Rama y Daniel Larsson. El kosovar, con la camiseta del Örebro SK, y el mediapunta sueco, defendiendo al Malmö.
El conjunto de Miroslav Djukic se globaliza. Internacional, acoge a futbolistas oriundos de lugares tan alejados como Venezuela o Serbia. En este ejercicio de diversidad, llega a la disciplina blanquivioleta el kosovar Valdet Rama (1987), procedente del recién descendido a la Superettan -Segunda División sueca-, el Örebro SK.
Ya en Valladolid, Rama tendrá que socializarse con sus compañeros de equipo, desconocidos para él. Aunque no todos. Daniel Larsson, futbolista que aterrizó en la ciudad pucelana a finales del año pasado, suponiendo el primer refuerzo invernal, ya coincidió en dos temporadas en la misma liga que la flamante nueva incorporación de los castellanos.
En el año 2011, Valdet Rama y Daniel Larsson se vieron las caras en dos ocasiones. La primera, un quince de mayo. Malmö y Örebro disputaban la octava jornada liguera, y tendrían como protagonistas a Larsson y Valdet. El sueco, porque jugó de inicio; y Rama, porque suyo fue el primer gol del encuentro, que se vería equilibrado y neutralizado por los dos tantos de Guillermo Molins -asistido por Larsson en ambos-. Goles que le dieron el triunfo final al Malmö (2-1).
En la jornada vigesimocuarta de la misma temporada, ambos conjuntos volvían a enfrentarse. Pero en esta ocasión, las miradas del gol se dirigirían a Daniel Larsson. Su tanto en el descuento otorgó el triunfo definitivo a su conjunto (1-2) frente al de Valdet Rama -quien formó de inicio, aunque fue sustituido en el segundo tiempo-.
En aquella campaña, Valdet Rama, con ocho goles, se alzó como el máximo realizador del Örebro SK. En la siguiente, todo se iba a torcer, al caer a la segunda categoría del fútbol sueco tras un nefasto curso en el que su equipo solo obtuvo veinticuatro puntos. Y rama, únicamente, materializó dos tantos. Fue la última vez que los aficionados suecos podrían ver sobre un mismo césped de la Allsvenskan a Larsson y Rama.
En julio del año pasado, la jornada decimocuarta, adentrándose en el ecuador de la competición sueca, ofrecería un Örebro-Malmö que sí sonrió a Valdet Rama. Los locales vencieron (2-1), remontaron el gol del Malmö y el potente extremo pudo jugar los noventa minutos de partido. Mientras tanto, Daniel Larsson fue sustituido en el minuto 73.
Pero esa alegría del Örebro se pudo comparar con un minúsculo grano de arena en una inmensa playa porque descendió, llegando a la penúltima jornada de liga, en noviembre, ante el Malmö, sin opción alguna de milagro. En el último partido en que Larsson y Valdet cohabitaron en el mismo campo, apenas lo hicieron unos minutos, porque el sueco -que se despedía de su equipo- fue cambiado en el segundo tiempo y Valdet Rama partió desde el banquillo, jugando la última media hora de un encuentro que finalizó con empate a uno.
Larsson ha presenciado el golazo de Rama, y este el doloroso tanto de Larsson en el descuento. Rama ha contemplado cómo Larsson asistía a Molins por dos veces para que remontaran su gol. Y Larsson ha observado el descenso del equipo de Rama, desde la comodidad de no sufrir con el suyo. Pero ambos, a 31 de enero de 2013, ya dejarán de mirar por sus equipos, porque forman parte del mismo: el Real Valladolid. El destino, tres meses después de aquel partido, quiso que ambos futbolistas se unieran, lejos de Suecia, en una aventura de tintes blanco y violeta.