El filial del Real Valladolid buscará el miércoles en Miramar su primera victoria como visitante de la temporada frente al Marino de Luanco

El Real Valladolid Promesas necesita con ansia volver a sonreír lejos de Los Anexos del José Zorrilla. Y es que para los pupilos de Javier Baraja ganar fuera de casa se ha convertido en casi una utopía, una hazaña hercúlea y que, sin duda, necesita superar si quiere seguir soñando con conseguir situarse en los puestos altos del grupo.
Es que, si se repasan los últimos partidos como visitante del Promesas, las estadísticas no son nada esperanzadoras. El filial blanquivioleta no gana en uno de sus viajes desde el veinticuatro de noviembre de 2019 ante el Burgos. Y lo hizo sufriendo, con un gol de Miguel en el minuto 85.
Desde entonces, en su casillero constan un total de seis empates y dos derrotas, la última de ellas esta temporada ante, precisamente, otro equipo asturiano, el Langreo. Ahora deberán viajar a Miramar (miércoles, 17:00 horas), donde se medirán al Marino, equipo que no pasa por su mejor momento.
Es por eso que Javier Baraja aseguró que el equipo afronta el encuentro «con ganas de ganar fuera» y de demostrar que el equipo tiene «ese nivel» que todo el mundo piensa.
El Marino de Luanco llega al choque como penúltimo de la clasificación, tras caer en su último partido ante el Burgos por dos goles a cero, y sin conocer la victoria esta temporada. Sin embargo, fue como local como consiguió el único punto de la temporada hasta la fecha, cuando empató a dos ante el Lealtad.
Sobre el Marino, Baraja explicó que el club pasa por una «circunstancias complicadas» que le han obligado «a estar un tiempo parado» e imagina «que lo acusaran». No obstante, el técnico advirtió que el partido les va «a costar mucho en un campo que posiblemente no esté en las mejores condiciones contra un rival que tiene muy claro a lo que juega», y añadió que el equipo tiene «que interpretar el partido para sacar rendimiento de lo que haga».
A falta de conocer la convocatoria oficial, el técnico blanquivioleta está «a punto de recuperar a Amoah» y podrá volver a disponer de Vilarrasa, convocado por el primer equipo el fin de semana. Con el deseo de tener «todos los recursos» en una semana de tres partidos, en técnico se mostró esperanzado con el triunfo en un choque que podrá seguirse a través de Footters y que corresponde a la cuarta jornada, que no se disputó por la COVID.
La historia, a favor del Promesas
Es cierto que fuera de casa el Promesas no está pasando por su mejor racha, pero siempre ha y sitio para un rayo de esperanza. Y es que, si se atiende a la historia, el conjunto asturiano y el pucelano se han medido en Segunda División B en hasta cuatro ocasiones en territorio asturiano. Y el balance favorece a blanquivioletas, ya que en dos de los cuatro partidos la victoria cayó del lado visitante, además de un empate.
La primera victoria fue en 2007, con Onésimo en el banquillo y con un único gol de Bayón en la segunda mitad que dio la victoria a los pucelanos. La más cercada, hay que remontarse a la temporada 2014/15, donde tres goles, dos en la primera parte de Guille Andrés y Xavi Carmona, y uno en los minutos finales obra de Ayub, permitieron al Promesas aplastar al Marino de Luanco.