Las cifras del conjunto blanquivioleta en las primeras ocho jornadas son peores que las de otras temporadas anteriores, en las cuales el inicio fue del mismo modo aciago, aunque acabó con la salvación del equipo
Foto: LaLiga
Después de la derrota cosechada por el Real Valladolid en el Estadio de la Cerámica, el equipo dirigido por Sergio González suma tres empates y cinco derrotas, es decir, solamente tres puntos de veinticuatro posibles, racha que conlleva que el Pucela sea el último clasificado de la Liga Santander y confirme el peor arranque en la competición de su historia.
En la temporada 1952/53, en la que cada victoria valía dos puntos, el Real Valladolid, dirigido en aquel momento por José Iraragorri, comenzó la campaña goleando a domicilio al Zaragoza, que acabaría siendo colista. Con un resultado de cero a cuatro, los blanquivioletas se hicieron con su primer triunfo, al cual, sin embargo, le seguirían hasta seis derrotas consecutivas.
En la octava jornada, logró puntuar de nuevo con un empate 2-2 frente al Sporting de Gijón, con un balance total de tres puntos de dieciséis posibles. El reencuentro del Pucela con la victoria fue en la novena cita por 1-0 frente al Athletic Club. En la trigésima y última fecha, el Real Valladolid terminó el curso con veinticinco puntos y un puesto por encima del descenso.
En la campaña 1982-83, el cuadro blanquivioleta no logró ni una sola victoria en el mismo intervalo de partidos. El equipo puntuó en la primera jornada con un empate 2-2 frente al Real Madrid, pero la competición avanzaba y, entre tablas y derrotas, no conseguía salir victorioso de ningún encuentro. Felipe Mesones estuvo al mando del conjunto en esta ocasión, logró cuatro empates y cuatro derrotas en ocho partidos, cuatro puntos de dieciséis posibles.
Al no mejorar los resultados, fue destituido en la décima jornada, Santiago Llorente asumió el cargo como interino durante un partido y, finalmente, llegó García Traid, que logró salvar al Real Valladolid. Con 29 puntos en 34 fechas, el Pucela logró mantenerse en la máxima categoría con un margen de cuatro posiciones por encima del descenso y no alcanzó su primera victoria hasta la jornada catorce, tras vencer por 2-0 al Racing de Santander.
En el curso 1997-98, el Real Valladolid cosechó una victoria, un empate y seis derrotas en las primeras ocho jornadas. Después de cinco enfrentamientos sin puntuar, el Pucela salió airoso por primera vez en la sexta jornada con un marcador de 1-3 frente al Deportivo de La Coruña. A este primer triunfo le siguió un empate 1-1 ante el Sporting de Gijón. Esta vez, los blanquivioletas sumaron cuatro puntos de veinticuatro posibles en el arranque de la competición.
Vicente Cantatore fue el técnico que comenzó esta temporada con el Real Valladolid, pero fue destituido en la tercera jornada por el vicepresidente de la entidad mientras ambos participaban en un programa de radio de la cadena COPE. Antonio Santos dirigió como interino al equipo durante un partido y después llegó Sergio Kresic para tomar las riendas y mantener al equipo en primera de forma holgada. El Real Valladolid terminó la temporada con cincuenta puntos en la undécima posición. Solamente a un puesto de clasificarse para la, a día de hoy extinta, Copa Intertoto de la UEFA.
Con todo, pese al arduo arranque del Real Valladolid, existen precedentes de situaciones similares y ha quedado más que demostrado que aún es posible lograr la permanencia de manera solvente. Este domingo, los hombres de Sergio González tienen una nueva oportunidad en casa para hacerse con los primeros tres puntos de la temporada. Precisamente, en la misma jornada y ante el mismo rival que en el curso 1952-53, donde vencieron por la mínima al Athletic Club después de siete fechas sin ganar, puede ser una gran ocasión para repetir la historia.
