Tras un tiempo buscando una nueva pieza para la portería, la llegada del ex de Olimpiakos, Zaragoza o Alavés suma experiencia en el máximo nivel en el último tramo de su carrera

El Real Valladolid firma a Roberto Jiménez para sumar en una plantilla que necesitaba de esos guantes suplentes para completar la nómina de guardametas en el equipo. Tras pasar por Atlético de Madrid, Zaragoza, Olimpiakos o West Ham, entre otros, el meta madrileño de 34 años llega al Pucela para aportar experiencia al equipo de Sergio González en LaLiga.
Nacido en Fuenlabrada en 1986, Roberto comienza su andadura como meta en las categorías inferiores del Atlético de Madrid. Tras pasar por el primer equipo, buscó minutos en Nástic, Recreativo de Huelva, Olimpiakos, Zaragoza, Benfica, Espanyol o Málaga, antes de dar el salto a la Premier League, donde Pellegrini lo fichó para el West Ham.
Esa última etapa no funcionó nada bien, saliendo cedido rumbo a Vitoria para acabar la 2019/20 con el Alavés, donde pudo mostrar un nivel más que aceptable en los nueve encuentros jugados, destacando especialmente ante el Real Betis, donde cuajó una excelente actuación.
Roberto es un portero que destaca ampliamente por sus reflejos. Es un guardameta felino que confía en sus habilidades cerca del marco y que consigue ser importante en las jugadas dentro del área. Abusa del despeje, por lo que suele necesitar una defensa que cubra con concentración y rapidez esos balones sueltos y, a pesar de su altura (1’92 metros), no destaca de manera extraordinaria en el juego aéreo. Tiende a iniciar el juego en largo y suele ser preciso en ese tipo de entregas.
A pesar de lo largo de su currículum, sus etapas en Zaragoza, en LaLiga y en El Pireo, en la Superliga de Grecia, han sido sus mejores momentos a nivel deportivo, destacando como titular en ambos conjuntos y cuajando un nivel más que positivo. Con el Real Zaragoza llegó a los 88 partidos con la elástica maña, mientras que con el Olimpiakos llegó a los 117 encuentros, entrando en la historia del club griego.
Si la titularidad de Jordi Masip hasta el momento está confirmada, la baja a mitad de temporada de Lunin volvió a poner el foco en la posibilidad de encontrar un meta que pueda pelear el puesto y que garantice la suplencia. Tras el mal año de Caro la temporada pasada se hacía imprescindible ir al mercado a buscar esa pieza.
Hace tiempo que el Real Valladolid buscaba firmar un guardamenta que pudiera sumar más allá de ser solo un suplente, pudiendo pelear con Jordi Masip por la titularidad y que dé cierta seguridad en aquellos partidos en los que Sergio González necesite un portero suplente. A sus 34 años, Roberto tiene un nuevo reto en LaLiga, una competición que conoce bien y en la que querrá dejar atrás viejos fantasmas en un club que buscará pasar otra temporada sin demasiados sustos.