Pese a los pequeños tropiezos, los chicos de Ricardo López continúan siendo el tercer mejor equipo del Grupo V de División de Honor
Foto: Jesús Domínguez
En ocasiones, la vida pone pequeñas piedras en el camino que hace que te tropieces, pero sigues tu andadura y te fijas con más detalle para no volver a tropezar. Para el Real Valladolid de División de Honor esas ‘piedrecitas’ son los conjuntos que se sitúan en la parte baja de la clasificación y qué debido a sus necesidades, salir de la zona de descenso, llevan a sus rivales a emplearse al máximo. Pese a tener estos leves resbalones, los pucelanos continúan una semana más en tercera posición.
El encuentro frente el CD Badajoz fue el quinto tropiezo en lo que va de liga ante rivales de abajo. El conjunto pacense, que está situado a tres puntos de la salvación, en decimocuarta posición, supo sacar rédito de su estancia en Los Anexos. Aunque Torres adelanto a los locales en el primer tiempo, Mario, tras un magnifico desborde, empató. El gol estimuló al Real Valladolid con un arreón final, pero ni la velocidad de Iker por banda derecha ni la asociación Slavy-Castri pudieron dar la victoria a su equipo.
Antes, los chicos de Ricardo López cayeron ante el Móstoles y Unión Adarve, también en su feudo, en la jornada dos y doce, respectivamente. El conjunto mostoleño, undécimo en la tabla con un punto sobre el descenso, supo encontrar las cosquillas de los blanquivioletas y lograron imponerse por uno a dos, llevándose así un valioso botín. La historia se repitió ante el decimotercer clasificado, el Unión Adarve. El gol de Marcos Talavera, en el minuto sesenta, sirvió para que el cuadro rojinegro se alzase como vencedor.
Asimismo, anteriormente, a los blanquivioletas se le escaparon dos empates fuera de casa contra el AD Alcorcón y Burgos CF. Ambos equipos se encuentran con veintiséis puntos, dos sobre la zona de descenso, y pelean por escaparse de la zona baja de la clasificación, de la que los burgaleses han huido de manera momentánea después de dar la sorpresa venciendo al Atlético de Madrid por dos goles a uno. En su casa, donde el Real Madrid solo pudo ganar en el tiempo de descuento y donde empató el Divi con mucho sufrimiento.
Con todo, no porque el Real Valladolid se haya encontrado pequeñas piedras tiene que dejar el camino sin recorrer. Pese a estos tropiezos, continúa una semana más en tercera posición con nueve puntos de diferencia con el cuarto, el Getafe CF. De hecho, como contraste, cabe recordar que los pupilos de Ricardo López puntuaron recientemente en Valdebebas, donde el Real Madrid llevaba diecisiete victorias seguidas en liga y el Divi no puntuaba desde hacía siete años.
