El conjunto naranja cae ante el Racing Féminas tras encajar dos goles desde el córner y, una vez más, sin ver puerta

Cuando el Parquesol consiguió el ascenso a la Segunda División Pro, se comenzaba un camino ilusionante, pero no exento de dificultades propias de una categoría como esta. Tras siete jornadas, las naranjas lo han comprobado y se encuentran en una primera crisis de gol y resultados, una especie de pequeña odisea, que se ha prolongado con la derrota —la tercera consecutiva— ante el Racing Féminas.
Los primeros compases del partido se caracterizaron por no tener dueño y predominó un juego muy trabado. El conjunto naranja trataba de aproximarse al área rival mediante combinaciones, mientras que el Racing de Santander lo intentaba al contraataque y a balón parado, donde lograban crear más peligro.
De esta forma, las cántabras se adelantaron en el marcador. Un remate de Saraha Troccoli en un córner le dio la ventaja al conjunto visitante al término de la primera mitad, que le sirvió para llegar al descanso por delante.
La segunda mitad arrancó como acabó la primera, con otro gol de saque de esquina del conjunto visitante, esta vez a manos de Maialen, cuando trataba de rearmarse el CD Parquesol del golpe que supuso el primer gol encajado. A raíz del segundo tanto, Rubén Jiménez movió filas en busca de una reacción positiva. Y el equipo local lo intentó con más madera en ataque. Yarima, Sara y Alaitz fueron a por ese gol que no llegaba y que, otro partido más, terminó por no surgir.
Solo con algún disparo lejano y centros laterales se acercó el Parquesol, aunque estuvo lejos de crear peligro ante la defensa de las de Santander. Como en otras ocasiones fue al final cuando de verdad apretó la máquina, pero fue peor el remedio que la enfermedad.
Con el Parquesol volcado, las chicas del Racing aprovecharon para sentenciar el partido al contraataque, primero con el tanto de Melanie Monteagudo y después, con una jugadora más debido a la expulsión por doble amarilla de Sara Buitrago, Lice Chamorro puso el definitivo 0-4 en el marcador.
Sin duda, se trata de un golpe duro para un conjunto de Rubén Jiménez que quería dedicare el triunfo a Maka, que se perderá lo que resta de temporada y que, por ello, su equipo le realizó un precioso homenaje antes de comenzar el partido. No fue así y el conjunto naranja una posición más puesto que las cántabras solamente tenían tres puntos.
Ahora las naranjas se quedan con cinco, al borde del descenso e intentarán acabar de una vez con esta mala racha de gol –420 minutos sin macar– y de resultados en la capital ante un rival directo. Se medirán con el Madrid CFF B, otro equipo con urgencias en la liga.