El centrocampista del Real Valladolid alega que el siguiente partido se debe «intentar ganar» porque el Real Club Celta también está tocado anímicamente
El Real Valladolid continuó este lunes con su preparación del partido del próximo domingo a las 12:00 horas en el Estadio José Zorrilla frente al Real Club Celta. En la sesión, celebrada a las 14:00 horas después de la llegada en tren desde Valencia, se ejercitaron todos los jugadores a excepción del lesionado Luismi, Ivi, con molestias, y Ünal por precaución. Sin embargo, los titulares ante el Levante entrenaron a un ritmo menor que el resto de sus compañeros.
A la conclusión, Borja Fernández atendió a los medios de comunicación. El mediocentro sabe que arbitrar es «una labor difícil», pero esperaba que con el VAR «las cosas se solucionasen. «Vemos que siempre salimos perjudicados, siempre hay algo que va en contra nuestra», comentó. Tal y como confirmó, el equipo espera «con ansias el partido del Celta» para seguir haciendo lo que estaba haciendo, !luchando y haciendo las cosas bien para poder sacar puntos».
Con respecto a la idoneidad de emitir une comunicado de disconformidad, el gallego cree que el club sí lo ha hecho, pero de puertas para dentro: «Se está pronunciando en privado para intentar revertir esta situación. Ayer [por el domingo] me quedé hablando con el árbitro, y lo hice desde el respeto. El club está moviéndose para dar parte de lo ocurrido, aunque no se sabe si será suficiente. Esperemos que el VAR no nos siga perjudicando como hasta ahora».
El Levante protestó acciones similares a las concurridas en el Ciudad de Valencia y parece ser que se le ha escuchado. Sin embargo, el Real Valladolid, con fallos como el del otro día, sigue sin pronunciarse. «El comunicado que ha emitido el Real Valladolid en privado no lo han enviado ayer, es de antes. Yo no te puedo decir más en ese sentido, tendrán que comunicarlo otros porque son los que así lo han hecho. Al Levante le funcionó ayer y al Leganés no sabemos si le saldrá bien», alegó Borja.
La jugada más polémica del partido contra el Levante fue el gol anulado de Óscar Plano porque supuestamente Ünal estorbaba la visión de Oier. El colegiado tardó seis minutos en revisar la jugada, y mientras lo hacía le comentó lo siguiente a Borja: «Hay uno en fuera de juego y resultó que era yo, aunque estaba fuera de la portería. Cuando va a ver la imagen todos sabemos lo que va a pasar. El día del Athletic, por ejemplo, un jugador me dice que le ha dado en la mano y, sin embargo, el árbitro discrepa y me dice que le ha dado en el cuerpo».
Después de esta acción la moral del equipo cambia, aunque lo que tenía que hacer el equipo era «volver al comienzo de la segunda parte», porque lo estaba «haciendo muy bien». No obstante, y aunque «es duro», el centrocampista definió al Pucela como «un equipo luchador», algo que debe tratar de mostrar ante el Celta, también necesitado de puntos. «Esperemos que sigan fastidiados porque consigamos la victoria; la necesitamos para volver a afianzarnos en la tabla», comentó.
Se prevé que en ese choque la Federación de Peñas proteste, y Borja aguarda que sea «con respeto, educación y apoyando al equipo», porque lo que más importa es seguir «unidos por una causa», la de la permanencia, por la cual el Real Valladolid quiere «dar batalla» a pesar de la mala racha actual.
