El Real Valladolid Promesas se conjuró con el público blanquivioleta para conseguir un punto trabajado ante un rival muy exigente

El estadio José Zorrilla volvió a abrir sus puertas para acoger un partido del Real Valladolid Promesas. No hay duda de que siempre que esto ocurre se trata de una ocasión especial, un partido diferente. Con derbi regional ante la Cultural Leonesa, más si cabe. Todos estos ingredientes los conocían los chicos del filial que rozaron un nivel de intensidad elevado para no permitir rugir al león.
Lejos de lo que se presuponía una gran afluencia de público de la hinchada visitante, la afición local de Zorrilla ganó la batalla y encorajinó a los chicos de un Miguel Rivera que vio el partido en la grada. Hasta tal punto que llegó incluso a desesperar por ciertos momentos a los jugadores de la Cultural. O sino que se lo pregunten a Nicho, ajusticiado en cada balón que tocaba por la grada y que terminó el partido desquiciado, al borde de caer en una segunda amonestación provocada por la afición local.
En lo referente al juego, la Cultural planteó un partido en el que quería tener el control del balón y así lo hizo. Con mayor presencia y oportunidades que su rival, pero sin gozar de ocasiones muy claras. Solo en los cinco últimos minutos de la primera mitad tuvo grandes chances de inaugurar el marcador. Y vaya si lo hizo. Tuvieron acercamientos de los que encogen la respiración por cómo merodeaba el balón por el área del Promesas.
Por su parte, el filial tenía claro cuál era su partido. Lo intentaba desde donde fuera y cómo fuera. Hasta el punto de querer emular, saque de esquina mediante, el gol de córner de Nacho, jugador del primer equipo. En dónde Waldo era Nacho y Kike Pérez, Óscar Plano. Sin éxito. Como el que tampoco tuvo ni Pedrosa, ni Javi Pérez. Este último gozó además de la oportunidad más clara de los suyos con un disparo duro desde la frontal.
El tiempo de descanso sentó como una bofetada para los blanquivioletas. O mejor dicho, reactivó a los visitantes porque acumularon sus mejores quince minutos de partido en la reanudación. Yeray, de cabeza, tuvo la más clara para los suyos, pero Samu salvó como pudo con las rodillas. Mención también para la velocidad de Liberto. Cerca estuvo también de adelantar a los suyos en un remate en el área.
Eso sí, el Promesas resurgió con el primer acercamiento local. Waldo le colocó un buen balón a Javi Pérez que no llegó a conectar bien con la portería. Esa ocasión sumada a la posterior de Zalazar, un minuto después, en la que se revolvió en el área y consiguió sacar un buen disparo que obligó a Palatsí a estirarse abajo.
La Cultural acusó la lesión de Señé en el primer cuarto de hora del partido y el Promesas echó de menos a Kike Pérez en zona de tres cuartos en el tramo final del mismo. Solo la chispa de Víctor Socorro, el juvenil canario del División de Honor, pareció reactivar a los blanquivioletas en el transcurso final del mismo, pero sin resultado traducido en goles.
Segundo empate consecutivo del Promesas en otro nuevo derbi, tras el del fin de semana pasado frente a Unionistas. Para intentar conseguir volver a la senda de la victoria, el filial afrontará el próximo domingo a las 12:00 horas un nuevo envite en casa del Navalcarnero que sirva para sumar de nuevo de tres en tres puntos.
Real Valladolid B: Samuel, Raúl Navarro, Corral, Mario, Seydu (Abel, min. 86), Pablo (Zalazar, min. 46), Javi Pérez, Pedrosa (Socorro, min. 77), Kike y Waldo.
(0) Cultural y Deportiva Leonesa: Palatsi, Sergio Marcos, Señé (Mancebo, min. 15), Martínez (Yeray, min. 46), Iván González, Bernal, Eneko Capilla, José Alonso, Nicho, Liberto (Saúl, min. 74) y Zelu.
Árbitro: El colegiado Valdés Díaz amonestó a los vallisoletanos Carrascal, Mario y Kike y a los visitantes Zelu, Nicho, Sergio Marcos e Iván González.
Incidencias: Unos 2.000 espectadores (300 de ellos de León) presenciaron el partido, correspondiente a la novena jornada, en el Estadio José Zorrilla.