Restan tres jornadas para acabar la temporada y el Promesas tiene por delante un exigente calendario en el que le quedan dos salidas ante rivales directos y la visitan en la última fecha del Real Madrid Castilla
Al libro de la temporada del Real Valladolid B tan solo le restan tres capítulos para cerrar las tapas y ponerlo en la estantería y, dependiendo de su final, volver a leerlo una y otra vez o dejarlo en la balda cogiendo polvo con el paso inexorable del tiempo. Que el equipo de Miguel Rivera pueda tener un final glorioso y conseguir una salvación que hasta hace poco parecía imposible, pero ahora es más que factible y sería el culmen una oda a la cabezonería de un entrenador y un equipo que no ha perdido la fe en ningún momento.
La temporada del Promesas es como una novela de Dawn Brown en el que el andaluz ha tenido que resolver problemas como el Profesor Robert Langdon en el ‘Código Da Vinci’, aunque mucho pudieran pensar durante mucho tiempo que en verdad fuera Homer Simpson tocando un botón al azar en la central nuclear de Springfield.
El principal escollo con el que se encontró el técnico de la confianza de Miguel Ángel Gómez fue un grupo de chavales hundidos porque por aquellos entonces no era tan siquiera un equipo, sino un grupo que intentaba jugar al fútbol como un equipo. La llegada de muchos jugadores extranjeros a préstamo por el Watford y el escaso tiempo para cohesionarse hizo que el comienzo de temporada fue nefasto.
Pasaron las jornadas y llegó Miguel Rivera al banquillo del Promesas en sustitución de un Carlos Salvachúa que se rindió y no se vio capaz de sacar adelante al equipo. Pero Rivera era diferente y estaba seguro que sería capaz de exprimir a los chicos y conseguir lo resultados esperados.
Parecía imposible, pero el tesón del técnico dio sus frutos y no solo ha conseguido sacar al equipo del farolillo rojo, sino que lo ha dejado en puestos de salvación a falta de tres jornada para el fin de la temporada. Queda rematar la faena, resolver el misterio final con la consecución de la permanencia.
No será sencillo, pues el equipo tiene que jugar dos de esos últimos tres partidos lejos de Los Anexos ante equipos que tiene opciones de mantearse también. La parte positiva es que el la última jornada se jugará en los Anexos y por seguro que el equipo tendrá el aliento de los aficionados para celebrar la salvación del equipo.
Mismamente este fin de semana el Promesas debe salvar la primera piedra en el camino en casa del Racing de Ferrol, que tiene 38 puntos y está por debajo de los blanquivioletas, que suman cuarenta. Conseguir el triunfo sería condenar a Tercera casi de manera segura a un rival directo en la lucha por la salvación y tener pié y medio en el objetivo.
Poco tiempo habrá para festejos o lamentaciones porque la siguiente jornada el equipo debe desplazarse a Segovia para jugar ante la Gimnástica, que o bien puede estar ya matemáticamente descendido, o bien estar luchando por la permanencia o la plaza en la promoción a Tercera. El colofón final será ante el Real Madrid Castilla y en Los Anexos, sin duda un escenario inmejorable para celebrar la permanencia. Los merengues no deben jugarse nada en esa última jornada y podrían echar un capote al Promesas de necesitar los puntos, aunque bien es cierto que a ningún equipo le gusta acabar el año con sabor a derrota.
Foto: Sergio Borja
Como hemos dicho el Real Valladolid B depende de si mismo para conseguir salvarse, pero tampoco viene mal mirar con quiénes se enfrentaran sus rivales directos por la permanencia.
Duelos directos
Mirando la clasificación se podría decir que hasta la Ponferradina la salvación aún no está asegurada, aunque el conjunto de El Bierzo mantendrá la categoría salvo castastofre mayúscula. Así pues, diremos que la permanencia se la disputarían desde el Guijuelo hasta el Toledo, si bien este último tiene pie y medio para jugar en Tercera División la próxima temporada.
El Cerceda ya está matemáticamente descendido y su único rival de la parte baja de tabla con el que se verá las caras en estás últimas jornadas será la Ponferradina, este mismo fin de semana.
Comencemos así un breve repaso de los rivales a los que se van a enfrentar en estas últimas tres jornadas los contendientes por la permanencia. Para hacerlo más sencillo iremos desde el que está más arriba, hasta el más abajo.
El primero en la lista es el Guijuelo, con media salvación en el bolsillo tiene que enfrentarse a rivales que no se juegan demasiado como son el Unión Adarve y el Atlético de Madrid B. Pero también tiene un choque complicado ante el Celta B, que se puede estar jugando en la última jornada entrar en el play-off de ascenso a Segunda División.
El siguiente en la lista y empatado a puntos con el Guijuelo, es el Pontevedra, que la semana pasada consiguió derrotar al Promesas después de una racha de doce partidos consecutivos sin perder. Ahora el conjunto gallego afronta las últimas jornadas con una dosis extra de moral, pero tendrá que luchar por su plaza empezando este mismo fin de semana en su ante la Gimnástica Segoviana, rival directo por la permanecía. Las dos siguientes jornadas tendrá que enfrentarse a la Unión Adarve y el Atlético de Madrid B, lo que hace que los pontevedreses tengan un calendario bastante asequible para mantenerse.
Hablemos ahora de otro equipo de Galicia, el Racing Club de Ferrol, que ahora mismo ocupa puesto de play-out. Si quiere tener opción alguna de quedarse en Segunda B tiene que comenzar por ganar este mismo fin de semana al Real Valladolid. Un choque épico entre dos equipos que se juegan mucho. El ganador de este encuentro puede dar un paso al frente para mantener la categoría, pues en las siguientes jornadas los gallegos tendrán que visitar al Real Madrid Castilla y enfrentarse al líder, el Rayo Majadahonda, en la última jornada.
Y hablando de equipos de esta región, hay que hacer hincapié en el Coruxo, empatado a puntos con el Real Valladolid B ahora mismo. Su primer escollo, el choque ante el Toledo y después se tendrá que ver las cara ante el Fuenlabrada, luchando por una plaza de promoción y ante la UD Sanse, sin nada en juego.
Con remotas posibilidades para salvarse está la Gimnástica Segoviana, que como ya hemos dicho tiene que enfrentarse esta jornada al Pontevedra. Después recibirá la visita del Promesas y por último se enfrentará al Adarve. Este mismo fin de semana puede consumar la perdida de la categoría, pero los segovianos lucharán por obrar el milagro.
El último en la lista es el Toledo, con todavía menos opciones de lograr la permanencia que la Segoviana, porque tendría que ganar todo y que sus rivales no lo logren, cosa que parece francamente imposible. Los toledanos jugaran este mismo fin de semana ante el Coruxo y después enfrentarse a la Ponferradina, ya salvada. Cerrará la campaña ante el filial del Deportivo de La Coruña, que busca hacerse con la primera plaza del grupo.
Repasados los calendarios de todos sus rivales, el Real Valladolid B tiene muchas opciones de poder mantener la categoría porque lo tiene en su mano y porque Miguel Rivera no está dispuesto a echar por tierra todo el trabajo realizado en los últimos meses para que la permanencia se le escurra de las manos en el último instante.