El técnico del Real Valladolid reconoció que la derrota ante el Córdoba es «un golpe muy duro» y restó importancia a la ausencia de Mata

Nuevo tiro en el pie del Real Valladolid, que cayó ante el Córdoba tras adelantarse con un gol de Javi Moyano en la última jugada de la primera parte. Su técnico, Luis César, cree que todo se debió a «un minuto fatídico». «El partido estaba controlado pero el penalti y la expulsión dieron aire fresco al equipo local», aseguró.
«Hemos pasado de marcar el 0-2 y que la gente se fuera del estadio a vernos treinta minutos con un hombre menos. El rival ha empujado con más hombres arriba, no han tenido muchas ocasiones pero las que ha tenido las ha metido. Ese minuto ha puesto todo patas arriba», recalcó el gallego.
En esa misma línea, el técnico lamentó el fallo de Gianniotas desde los once metros y la posterior expulsión de Luismi. «Dentro de un partido hay muchas claves y esa ha sido importante. Cuando podíamos jugar con la angustia y desesperación del Córdoba con un 0-2 nos hemos encontrado con un 0-1, un jugador menos y media hora por delante», subrayó.
A pesar de terminar el encuentro con uno menos, Luis César calificó la actuación del colegiado como «normal». «Ha tenido aciertos y errores como cualquier ser humano. La expulsión es justa: creo que hay un cabezazo de Aythami en la misma jugada e igual tenía que haber decretado otras dos expulsiones, pero no hemos perdido por el árbitro».
Asimismo, el entrenador blanquivioleta no cree que la ausencia de Mata haya sido un crucial para la derrota de los suyos. «Hemos hecho un partido en el que hemos tenido alternativas y nuestro problema no ha sido crear ocasiones. El encuentro tiene muchas lecturas pero no hemos perdido porque no haya venido Jaime«, valoró.
Con respecto a sus sustitutos este domingo, Toni Martínez y Chris Ramos, Luis César cree que ambos «hicieron su trabajo, con aciertos y errores» pero este, dentro de la actuación global del equipo, «no ha sido suficiente para ganar». Menos ante un rival como el Córdoba, «con entusiasmo, fuerza y energía», que «ha ido a por el partido» cuando el Pucela estaba con uno menos.
Para terminar su comparecencia, el técnico blanquivioleta reconoció que la derrota supone «un golpe muy duro» pero que «todavía queda mucha guerra». «Ha sido un partido un tanto accidentado que no entraba en mis previsiones pero hay liga para todos. Tenemos que continuar nuestra trayectoria en casa y ganar más partidos fuera«, sentenció.