Análisis del próximo rival del Real Valladolid

El Real Valladolid visita el Heliodoro Rodríguez López con la necesidad de continuar su buena racha, la misma que le ha dado doce de los últimos quince puntos. En cualquier otro contexto, un empate podría darse por bueno contra un rival, en teoría, de entidad, pero las circunstancias llevan al conjunto de Luis César Sampedro a sumar de tres para acariciar más de cerca el play-off, y hacerlo frente a un conjunto que, hoy por hoy, se encuentra lejos de ese objetivo, a seis puntos de los blanquivioletas.
Precisamente, la situación del conjunto chicharrero es similar a la del pucelano hace no muchas jornadas, antes de la racha de buenos resultados anteriormente comentada. El CD Tenerife se encuentra, actualmente, a ocho puntos del play-off objetivo primario del conjunto azulón a principio de temporada. Por ello, esta semana en la isla se hablaba de hacer piña, de intentar revertir la situación, con un técnico, Martí, muy cuestionado. ¿Les suena de algo?
Rival dolido
Por ello, el Tenerife es un rival peligroso, si cualquiera ya lo es en esta Segunda División. De hecho, los blanquiazules han logrado vencer en quince de las veintinueve ocasiones en las que han recibido al Real Valladolid. Todo ello, unido a la losa de ‘equipo aspirina’ que persigue el conjunto blanquivioleta, no presagia un partido fácil.
En su casa esta temporada son un equipo muy difícil de batir, ya que solo han sido derrotados en una ocasión. Por contra, han empatada tantos partidos como han ganado, con lo que su saldo es de veinte puntos cosechados en su feudo, cinco puntos menos en este apartado que los de Luis César.
La irregularidad, como no podría ser de otra manera, es el gran problema de los chicharreros. Su único momento de la temporada en el que consiguió encadenar una cierta regularidad de resultados fue a través de seis empates consecutivos, desde la jornada nueve a la trece, ambas incluidas, y con un empate copero frente al Espanyol de por medio.
Es el Tenerife un equipo muy experimentado, con hasta siete jugadores de los más habituales por encima de los treinta años. Una experiencia que, de momento, no está sirviendo para cumplir ningún objetivo. El de Juan Villar, nombre propio por excelencia, tampoco se está cumpliendo. El onubense ha jugado más partidos partiendo desde el banco que como titular, sumándose solamente 464 minutos y dos goles. Al igual que el conjunto, el exblanquivioleta ha ido de más a menos.
Incorporaciones veraniegas
Caso contrario es el de otro de los flamantes fichajes veraniego del CD Tenerife, Samuele Longo. El delantero transalpino acumula la nada desdeñable cifra de nueve tantos, aunque en los dos últimos encuentros no pudo jugar debido a una lesión.
La faceta goleadora también se reparte entre Juan Carlos y Malbasic, con cinco tantas cada uno, además del aporte del veterano Víctor Casadesús, quien fue el punto en el último encuentro de la escuadra chicharrera.
Esa derrota, frente al Barcelona B y en casa, ha escocido en la parroquia blanquiazul. La necesidad de victoria hace a este equipo más difícil aún si cabe. Quizás, la clave del encuentro y de cómo hacer daño al Tenerife resida en aguantar el resultado y confiar en que el ataque blanquivioleta esté a su nivel para deshacer una igualdad que parece predestinada.
Curiosidad del rival de la jornada: No será por experiencia de José Luis Martí… aunque más como jugador que como técnico. El técnico cerró su carrera en su ciudad natal, Mallorca, en 2015 para dar comienzo a su andadura como entrenador, momento en que cerró su cuenta con hasta cinco títulos en su haber personal: dos nacionales, una Copa del Rey y una Supercopa de España con el Sevilla; y tres internacionales, dos Copas de la UEFA y una Supercopa de Europa, también con el conjunto hispalense.