El portero y canterano blanquivioleta pasó por #HacemosCantera para hablar sobre su nueva etapa en el Ciudad de Lucena

Tras catorce años en la disciplina del Real Valladolid, Julio Iricibar hizo las maletas –literalmente– tras una crisis deportiva personal en la que incluso llegó a pensar en dejar el fútbol. Se marchó a vivir a Lucena y, hace unos días, en el equipo de la provincia cordobesa, que milita en el equivalente en Castilla y León a la Regional Aficionado, le ha llegado una nueva oportunidad para retomar el contacto con el balón.
«Les pregunté si podía entrenar con ellos, fui y al día siguiente me llamaron el entrenador y el director deportivo», explicó el cancerbero en #HacemosCantera. Porque meses atrás no fructificaron ninguna de las ofertas que tuvo. «En verano hubo equipos de Segunda B, pero no llegamos a un acuerdo. Decidí dejar aparcado el fútbol», comentó.
En diciembre volvió a contar con «cosillas», aunque el resultado fue el mismo que el de verano. Aunque «el gusanillo» regresó a él: «Me gusta el fútbol y y no podía seguir sin él». «Quiero ayudarles y a ver si sale algo el año que viene», apuntó.
Porque el objetivo que tiene entre ceja y ceja es jugar como profesional, pero sabe que debe ir paso a paso. «Voy a intentar estar lo mejor posible. He estado entrenando mañana y tarde. Soy el mismo que el año pasado», dijo. Pero la meta máxima que se marca para el próximo mercado estival es Segunda B. «Ahora no estoy para elegir. He salido de la rueda de porteros. Lo que llegue este verano, bienvenido sea», reconoció.
Respecto a lo blanco y violeta, aseguró que su salida del Pucela «fue un golpe un pelín duro». «Tenía la esperanza de poder contar para ellos», añadió. Y es que ahora observa desde la distancia, y «con envidia sana», la evolución del Promesas. «Sigo teniendo amigos allí y todo el cuerpo técnico es de 100«.
Echó la vista atrás con el trato a la cantera y afirmó que «antes era más circunstancial» la presencia de canteranos en el primer equipo, respecto a la situación que están viviendo José y Anuar. «Mis excompañeros se lo llevan mereciendo desde hace años», apuntó.
Su salida le dolió y, avanzada la temporada, señaló que ha pensado en que «podría haber estado de segundo portero» en el primer equipo. Pero, dejando a un lado esos detalle, alabó el cambio que se está produciendo en Zorrilla con los chicos que vienen desde atrás, como él. «Ahora se están haciendo las cosas muy bien en el Real Valladolid», sentenció.
Puedes escuchar la entrevista completa aquí (07:40):