El rendimiento de los delanteros del Real Valladolid está muy por debajo de lo esperado en un equipo que aspira a ascender a Primera División
De los cuatro delanteros utilizados hasta el momento por el Real Valladolid, el único que ha conseguido perforar el marco enemigo ha sido Rodri Ríos. El ‘nueve’ soriano ha realizado su famosa voltereta en cuatro ocasiones en diecinueve partidos, con una media realizadora menos destacable de lo que cabía esperar —anota un gol cada 326 minutos–.
Diego Rubio ha tenido aún menor protagonismo. El chileno aún no ha conseguido estrenarse en los doce partidos que ha jugado (404 minutos), si bien es cierto que tampoco ha tenido mucha continuidad —solo en tres ocasiones ha salido de inicio (dos encuentros completos)–.
Pero la mayor decepción en la delantera ha sido Erick Moreno. El colombiano, con un gran cartel en su país, no solo no se estrenó como goleador, sino que disputó dieciséis ínfimos minutos en liga (en Zorrilla ante el Real Oviedo) y veintiuno en Copa (también frente al Real Oviedo, esta vez en el Tartiere).
Tal ha sido el desalentador rendimiento del espigado delantero que ha sido el primer jugador en salir del club en este mercado de invierno. La escasez de minutos, unido a la reciente incorporación de Vincenzo Rennella, han hecho decantarse a un Erick Moreno que en un primer momento se resistía a abandonar la entidad pucelana. Finalmente ha dado su brazo a torcer y terminará la temporada en el Tondela de la liga portuguesa.
Otro delantero que ha sido utilizado es Caye Quintana, que disputó un encuentro precisamente frente al Córdoba en la jornada inicial –veintinueve minutos–. El onubense está teniendo poco protagonismo, e incluso con el Promesas el rendimiento es menor que se esperaba en un principio dado el gran rendimiento que dio en Segunda la temporada anterior en el Recreativo de Huelva (cuatro tantos en diecinueve partidos).
Tan discretas son las cifras goleadoras, que los atacantes han visto más amarillas que veces puerta. Así, las amonestaciones, once, casi triplican los goles, cuatro; a saber: Rodri siete amarillas (cuatro goles), Diego Rubio tres amonestaciones (cero tantos) y Caye Quintana una tarjeta (cero goles). Erick Moreno ha visto tantas amarillas como goles, es decir, cero.
Afortunadamente para el Real Valladolid, los goles que no han conseguido hacer los delanteros los está consiguiendo la que es, sin duda, la gran sorpresa (y revelación) del equipo en la primera vuelta, un Juan Villar que además ha logrado marcar en todas las victorias logradas por el equipo –salvo en la de la Romareda–.
El extremo onubense, que también fue utilizado en alguna ocasión por Gaizka Garitano como delantero centro sobre todo al principio de la temporada, ha conseguido perforar la portería contraria en nueve ocasiones, convirtiéndose en el máximo realizador del equipo y en uno de los jugadores más apetecibles de la Liga Adelante en este mercado de invierno.
Los pobres registros de los delanteros pucelanos han hecho mover ficha a Braulio Vázquez, director deportivo blanquivioleta, y la primera incorporación invernal, Vincenzo Rennella, viene a cubrir esas carencias ofensivas vistas en el equipo en el primer tramo de la temporada. Se espera que el exdelantero bético aporte brega, calidad, experiencia (102 encuentros en la Liga Adelante) y, sobre todo, goles.
Habrá que aguardar al cierre del mercado para ver cómo queda configurado el equipo para una segunda vuelta en la que se espera mayor competencia y goles en la delantera pucelana.
