A pesar de los varios meses que llevan sin cobrar, los jugadores del Real Valladolid Promesas no se rinden y continúan líderes de Tercera. Luchan por un sueño, el ascenso, y no dejarán de hacerlo hasta conseguirlo. Por eso gritan al unísono: «¡Esto no se acaba hasta que yo no gane!».