Djukic analizó al próximo rival y se centró en la situación en la que su equipo se encuentra en la tabla con respecto al resto de rivales directos.
Miroslav Djukic, entrenador del Real Valladolid, compareció en rueda de prensa previa al partido de este jueves frente al Recreativo de Huelva. El serbio quiere ir partido a partido y por eso aseguró que «estamos muy centrados en el partido de mañana porque sabemos que nos espera un rival difícil, que está haciendo una segunda vuelta muy buena, con gente con calidad a la contra y que puede hacernos daño».
«Nosotros estamos centradísimos en nuestro partido y sabemos que van a venir muy enchufados», recalcó.
Para el partido ante el decano del fútbol español, los blanquivioletas tendrán una baja muy notable, la de Álvaro Rubio. Del riojano, el míster dijo: «De Álvaro no voy a descubrir nada, ha hecho una segunda vuelta extraordinaria, pero Nafti es muy bueno. Para nosotros lo importante es el equipo, todos están comprometidos. Cada uno tenemos nuestras cualidades y formas de ser, Nafti es más defensivo y él se siente más cómodo ahí, cada uno aportará sus cosas al equipo».
Djukic prefiere que los equipos rivales vengan extra motivados, pero quiere que los principales rivales directos del Valladolid tengan encuentros tan complicados como los que juega su equipo. «Nuestros rivales vienen muy motivados, y yo estoy encantado porque me pongan las cosas difíciles, pero me gustaría que a los demás también, sabemos realmente que les estamos ahorrando un dineral al Celta. Esperemos que sigamos así».
El ritmo de la competición se ha acelerado en los últimos quince días al jugar entre semana también, algo que continuará de jugarse el play-off. Aun así, el míster pucelano no quiere excusas y fue tajante: «La acumulación de minutos es para todos, la gente lo lleva bien y esperemos que los demás se desgasten también», a lo que apostilló que «el iluminado que ha hecho el calendario no ha pensado en los jugadores. Hay muy poco tiempo para recuperarse, pero es ir encendiéndote una tras otra, son cosas del mismo iluminado»
El serbio aseguró firmemente que van a salir a tope en cada uno de los compromisos que quedan. «Nosotros no tenemos magia, tenemos que ir a full para forzar hasta el último momento y esperar un milagro. Si llegas al play-off desgastado por subir directo… pero tienes que hacerlo. No se pueden hacer cálculos, tenemos que ir a full y tener que agotar hasta el final el ascenso directo, aunque estoy seguro de que el Celta ganará todos los partidos. Pienso que van a ganar todo. El Xerez no se juega nada, el Nàstic tampoco y el Córdoba posiblemente vaya con el segundo equipo porque va a guardarse para el play-off. Yo apuesto por el Celta».
El míster, sin pelos en la lengua, no dudó en comentar que «nosotros iremos partido a partido, sudando e intentando ahorrar dinero al Celta. Vamos a ir a tope porque nosotros no tenemos otra posibilidad. Unos somos gilipollas y otros son listos en este país. Nosotros también podíamos primar, pero no tenemos ni para nuestros jugadores, llevamos cinco meses sin cobrar. Esto son reglas del juego y pelearemos hasta el final con ellas», a lo que añadió en tono sarcástico: «Esta noche voy a jugar la quiniela, apuesto por un uno fijo. En las películas siempre hay imprevistos, veremos a ver».
Pese a todo, Djukic repitió una y otra vez no tener miedo a los rivales porque «con nuestras armas iremos a por ello. Sudamos sangre en todos los partidos y me encanta, porque me siento orgulloso de cada punto que gana mi equipo». «Siempre iremos a muerte hasta el final. Este vestuario ha estado solito todo el año, y han peleado, así que todos los partidos saldrán a muerte, por eso estoy satisfecho», apuntó. «Cuando termine la liga o el play-off miraré a los ojos y estaré tranquilo cuando diga que lo hemos dado todo», expresó abiertamente.
Por último, esta mañana de miércoles, las seiscientas entradas para viajar a Alcorcón se agotaron en menos de dos horas. Respecto a esto, el técnico señaló que «sé que la gente ha detectado que el equipo está muy bien, que lo está dando todo. La ciudad está muy bien, muy metida también, pero no sé si será suficiente».