Real Valladolid y Osasuna no solo se enfrentarán este domingo por la victoria, sino por ver qué estrategia de alineaciones es la ganadora
La gestión de un vestuario es la parte que más quebraderos de cabeza trae a un entrenador. Que si la plantilla es demasiado corta, que si sobran jugadores, que si hay que dar una oportunidad a los del filial, que si los de fuera son mejores…
Este domingo, el Real Valladolid recibirá al Osasuna en el José Zorrilla a partir de las doce de la mañana. Más allá de los tres puntos, entrarán en juego dos modelos distintos de gestionar los recursos: la continuidad del bloque rojillo tendrá que hacer frente a las rotaciones blanquivioletas.
Liderato con un bloque sin apenas cambios
Tras dos derrotas consecutivas, Osasuna volvía a sumar los tres puntos la semana pasada y se colocaba a la cabeza de la categoría –empatado con el Córdoba, pero con un gol a favor más para los rojillos–. Así, los de Pamplona recuperan el liderato y suman ocho jornadas no consecutivas en los más alto.
El secreto del éxito radica en la continuidad. Enrique Martín ha decidido confiar en los mismos jugadores durante las trece jornadas de Liga, dando como resultado un bloque compacto que apenas conoce cambios.
Cinco son los jugadores que han sido titulares en todos los partidos disputados hasta la fecha: Nauzet, Oier, Nino, Torres y Unai. Exceptuando al cancerbero, todos de campo. De esos cuatro, Unai ha sido el único que ha disputado todos los minutos con el conjunto rojillo –además del mencionado meta Nauzet–. Tres jugadores más de la actual plantilla osasunista superan la decena de partidos como titulares. Es el caso de los hermanos Javier y Miguel Flaño, dos viejos conocidos de la parroquia rojilla, y de Mikel.
La continuidad también se deja ver en el banquillo. Enrique Martín ha optado por los mismos jugadores para actuar como revulsivos cuando las cosas se torcían. El que más veces ha saltado al campo como suplente ha sido Álex, que lo ha hecho en ocho ocasiones. Le siguen Kenan, Pucko, José y Olavide, con cuatro intervenciones desde el banquillo cada uno.
Por su parte, los más sustituidos en estos trece partidos han sido el máximo goleador rojillo, Torres, y dos de los revulsivos más utilizados, Álex y Olavide. Los tres han abandonado el césped antes de tiempo por decisión técnica cinco veces.
En busca de la estabilidad a través de las rotaciones
Por su parte, el Pucela afronta el partido del domingo tras conseguir la segunda victoria de la ‘era Portugal’. Los blanquivioletas han apostado por un modelo distinto al de Osasuna, en el que los cambios constantes han hecho que hasta veintitrés jugadores hayan disputado algún minuto con el primer equipo.
El que más veces ha sido titular esta temporada es Marcelo Silva. Le sigue Hermoso, aunque el defensa ha sido sustituido en una ocasión. Kepa, Villar, André Leão, Rodri y Timor, con once partidos jugando desde el inicio, completan el podium de los más habituales en las alineaciones.
Curioso es el caso del portero vasco, que, debido a sus compromisos con la selección española, ha cedido su puesto en el once inicial al canterano Julio en dos ocasiones. La situación de Kepa contrasta con la realidad de Osasuna y de la mayoría de equipos de Segunda División, en la que el portero suele ser el jugador con más minutos acumulados como titular.
Los cambios y las rotaciones también se notan en los banquillos. Hasta quince hombres han salido con el partido ya comenzado, tanto con Garitano como con Portugal. Los que más confianza han tenido por parte de los entrenadores han sido Guzmán y Diego Rubio, que han saltado al césped con el encuentro empezado en siete ocasiones. Peculiar es el caso de este último, pues el chileno todavía no ha disputado minutos como titular.
En el plano de los más sacrificados Rodri se lleva la palma, pues ha sido sustituido en siete ocasiones. Le siguen Mojica, Óscar y Manu del Moral, que se han ido al vestuario antes del pitido final en cinco ocasiones.