Análisis del próximo rival del Real Valladolid
Tras la derrota por tres goles a cero contra la Ponferradina, el Pucela quiere resarcirse con una victoria. Y para ello toca cambiar de competición. Es el turno de la Copa del Rey, y los blanquivioletas tienen sus esperanzas puestas en el ‘torneo del KO’ para dar una alegría a su afición.
Enfrente estará el Real Oviedo, que jugará con el factor campo a favor. Los asturianos vienen de ganar por tres a uno al Albacete en su feudo en una temporada que supone la primera en la liga profesional tras doce años alejados de ella. El del miércoles será un choque que servirá de preludio para el encuentro liguero en Zorrilla, en el que se espera que los aficionados carbayones se desplacen en masa para animar a su equipo.
Caras nuevas, misma base
Foto: Real Oviedo
En la que será su segunda temporada al frente del equipo carbayón, Sergio Egea ha optado por mantener la base de la plantilla que consiguió el ascenso el año pasado. Sin embargo, no por ello el argentino ha dejado de sucumbir a los encantos del mercado estival, y ha incorporado a diez nuevos jugadores.
Si hay una parte del campo especialmente renovada ha sido la defensa. Los asturianos cuentan con cuatro caras nuevas en esa posición, siendo la más destacada la de Carlos Peña. El lateral zurdo, primer fichaje de los carbayones este verano, llegó a Oviedo procedente del Valladolid tras cinco temporadas en la entidad vallisoletana.
Junto a la zaga, el centro del campo es la zona que mayor revolución ha sufrido. Buena parte de la culpa la tiene Pablo Hervías. El extremo riojano, que llega cedido de la Real Sociedad, ha demostrado en los últimos encuentros su gran capacidad de asociación, especialmente con Susaeta. Ambos han sido los jugadores más destacados en este inicio de liga, compenetrándose a la perfección y generando la mayoría de ocasiones de peligro para los carbayones.
Cervero y Linares siguen siendo las esperanzas del equipo en cuanto al ataque se refiere. A ellos se les unen Toché y Koné, que vienen a reforzar a los arietes que consiguieron el ascenso. El primero de ellos debutó contra el Alavés hace dos semanas, mientras que Koné sigue recuperándose de su lesión de rodilla.
Foto: Real Oviedo
Inicio con distintas sensaciones
En cuanto a la competición liguera, los tres primeros encuentros han dejado sensaciones distintas en la afición. El debut contra el Lugo en el Carlos Tartiere dejó un empate a dos goles en el marcador y, aunque el equipo dio la sensación de controlar el partido, la falta de pegada no permitió a los carbayones sumar los tres puntos.
En su primera salida –y primer desplazamiento masivo de la afición–, el equipo dio un paso atrás y mostró carencias defensivas y de control del balón en la derrota contra el Alavés. Esto último fue solventado contra el Albacete la semana pasada.
Aunque el marcador no lo refleja, los fallos defensivos hicieron que el partido se pusiera más cuesta arriba de lo debido. El encuentro de Copa será un buen momento para ver la evolución de ambos equipos, que llegan con una diferencia mínima de un punto.
Curiosidad del rival copero: Quince años han pasado desde que el Real Oviedo recibió por última vez al Valladolid en su feudo. En aquella ocasión los carbayones ganaron 4-1 a los blanquivioletas, en la que fue la última temporada de los asturianos en Primera División. La temporada pasada los azules se enfrentaron al Promesas en un partido que terminó con el mismo resultado que tres lustros atrás.