El juvenil Sergio dio la victoria al Atlético Tordesillas con un gol en el añadido, que deja más tocado al Villa de Simancas

Foto: Rosa M. Martín
Las lesiones suelen lastrar a los equipos, aunque no siempre es así. A veces, cuando no te queda otra, tienes que tirar de lo que viene por detrás. En el caso del Atlético Tordesillas, Turiel se ha visto obligado a ello y, en el derbi frente al Villa de Simancas, le ha salido cara al imponerse por un gol a cero. El juvenil Sergio entró en el campo en el minuto 85 y le bastaron ocho para marcar la que tuvo, en un encuentro en el que ambos equipos no estuvieron acertados de cara a portería.
En la locura de la segunda parte apareció Sergio. Ninguno de los dos conjuntos supo meterla anteriormente, pese al gran número de ocasiones que tuvieron. La puntería estaba tan desviada que los porteros tampoco realizaron grandes intervenciones. Eso sí, los palos terminaron bien peinados, ya que el balón les rozó bastantes veces.
Dar más de seis pases consecutivos parecía una utopía por parte de ambas escuadras. Pero cuando lo hicieron se pudieron ver las mejores jugadas del encuentro. Fallos hubo a patadas. La ansiedad de los dos equipos les hizo precipitarse en demasía. Solo tenían que pararse a pensar cómo hacer daño al rival, algo que al final sucedió más por errores del contrario que por aciertos propios.
Álvaro, quien se mostró desacertado durante todo el encuentro, y Fabio fueron los primeros en demostrar que la pólvora estaba mojada. El Villa de Simancas metió miedo al principio, pero Andoni se encargó de devolver el susto con una vaselina que casi termina en gol. A raíz de esa jugada, el Tordesillas se quitó la presión inicial y comenzó a dominar el partido. Hamad empezó a soltarse para crear peligro de tres cuartos hacia arriba. Pudo gozar de una clara ocasión, pero el linier consideró que estaba en fuera de juego cuando entraba en el área y se plantaba solo ante Guzón.
Por su parte, los simanquinos esperaban atrás para intentar pillar una contra. Zapa, el más activo de los visitantes, hiló una buena jugada por la banda derecha, pero Farolo se anticipó antes de que cogiera el esférico para quedarse solo ante él. El conjunto dirigido por Turiel no se arrugó y tuvo dos más. Andoni volvió a intentar una vaselina e Iván López, en la última del primer tiempo, cabeceó un saque de esquina que se fue lamiendo la madera.
En el segundo tiempo el conjunto rojiblanco continuó metiendo presión a la defensa rival. Jony estrelló un balón en la madera, Andoni -quien no tuvo su día goleador- perdonó de nuevo y Hamad se revolvió en el área para disparar cerca del poste. La pelotita no quería entrar y ni siquiera ir entre los tres palos.
Pero el Simancas no se rindió y convirtió el tramo final del encuentro en una locura. El empate le sabía a poco y fue a por más. Fabio, que había ganado la espalda a la defensa local, no aprovechó un buen balón al espacio, puesto que no acertó a rematar a la portería. La entrada de Cristian al campo había revolucionado el partido. El delantero lo dio todo sobre el césped. Primer puso un buen balón a Juli, pero este se entretuvo demasiado y al final chutó desviado. Después, lo intentó por su cuenta y sacó un disparo, tras una internada por la banda izquierda, que despejó con apuros Farolo.

Foto: Rosa M. Martín
Se habían venido arriba los franjiblancos en los últimos minutos. Parecían los más cuerdos dentro de la locura. De hecho, lograron un gol que no subió al marcador porque el árbitro vio falta de Juli sobre Jony, cuando el primero le ganó la partida al segundo. Esa jugada minó la moral de los de Diego Macón, que vieron cerca el triunfo y al final se fueron de vacío.
Entonces llegó el turno de Sergio. Hamad, en una buena acción individual, metió un balón entre líneas y allí apareció el juvenil -de primer año, demostrando que la edad no importa-, que había ganado la espalda a la defensa, para plantarse solo ante Guzón y superarle con un disparo raso a su izquierda. Pasaban tres minutos del noventa y el gol dejó dos caras. La de la alegría de los locales y la de la tristeza en los simanquinos, que volvieron a caer en los instantes finales de un partido.
Este triunfo, después de once encuentros, permite al Tordesillas colocarse con 43 puntos en la clasificación y acariciar la permanencia en la categoría. Mientras, al Villa de Simancas le hunde un poco más y, prácticamente, le deja sin opciones de salvación, ya que podría descender la próxima jornada, que se disputará este jueves.
Atlético Tordesillas: Farolo; Jony, Iván López, Viti, Romero; Alvarito, Ivi; Hamad, Josete, Tiri (Sergio, minuto 85); Andoni (Galache, minuto 73).
Villa de Simancas: Guzón; Zapa, Kelvin (Héctor, minuto 40), Jorge Martín, Peke; Jorge Gómez, Gallego; Fabio, Álvaro (Pablo, minuto 71), Kiko (Cristian, minuto 63); Juli.
Gol: 1-0, minuto 90+3: Sergio.
Árbitro: Diez Cano, asistido por López Pérez y Alegre Arribas. Amonestó con tarjeta amarilla al local Alvarito y a los visitantes Juli, Diego Macón, Gallego y Peke.
Incidencias: Partido correspondiente a la Jornada 33 del Grupo VIII de Tercera División. Alrededor de 400 espectadores se dieron cita en Las Salinas.