De nuevo jornada dispar para los equipos locales de la Liga Nacional de juveniles. El balance nos deja una victoria, un empate y dos derrotas
Los equipos vallisoletanos no terminan de carburar en la Liga Nacional y ya van pasando las jornadas, hasta el punto de faltar dos jornadas para el término de la primera vuelta. Es por ello, que la preocupación en algunos casos sea alta, ya que por lo visto hasta ahora el Betis y el Juvenil B del Real Valladolid parecen no levantar cabeza.
Por otro lado, en los barrios de Parquesol y Arturo Eyries se respira mejor. El Arces volvió a sumar. Consiguió sacar un punto de El Palero, a pesar de todos los contratiempos posibles acaecidos en su partido. Por su parte, los naranjas fueron —una vez más– la alegría de la jornada. No sin sufrimiento, eso sí.
No pudo ser. El Arces no consiguió una victoria en su casa frente al Fútbol Peña a pesar de que los visitantes estuvieron en inferioridad durante veinte minutos. Al menos, se consiguió sumar un empate en un partido marcado por la intensidad y la brega, más que por el propio fútbol.
En la primera parte no se llegó a concretar ninguna acción de gol. Los goles se reservaban para la segunda mitad. La Peña golpeó primero y se adelantó en el marcador por medio de Franco, en un saque de esquina. El central leonés se encontraba libre de marca en el segundo palo, y su cabezazo se coló en la portería defendida por Carlos.
El Arces, obligado a remar contracorriente, trató de dominar a su rival y buscar situaciones de peligro. Aumentaron la intensidad de su dominio con la expulsión del jugador visitante Riesco. El hecho de ser un hombre más se tradujo en un paso atrás por parte de los leoneses, y un paso hacia delante de los chicos de David Valbuena, que llegaron a cerrar la defensa con tres hombres.
Sería en los últimos minutos en dónde el Arces conseguiría el empate. El 1-1 llegaría en una de las últimas jugada de partido, por medio de Pani. Tras el gol, el protagonismo se centró en el árbitro, Jorge De la Fuente Ramos, más que en los propios jugadores. Como ya es habitual, sacó las tarjetas a pasear durante todo el encuentro y ambos equipos terminaron con dos jugadores expulsados.
Con el empate, el Arces se sitúa en una cómoda novena plaza con dieciocho puntos en su cuenta, más cerca ya de su objetivo. La próxima jornada, los celestes se desplazan a la Ciudad Deportiva de Francisco Rubio, para medirse al filial juvenil del Numancia.
No pudo ser. El CD Parquesol, a pesar de su victoria, no consiguió recortar puntos con el líder, el Burgos CF y sus diferentes perseguidores como Santa Marta. Eso sí, pudo recortar puntos a la CIA de Palencia y adelantar en la clasificación al Fútbol Peña de León, que precisamente será su próximo rival en la competición.
En lo referente al partido, el Parquesol consiguió una victoria extrema. El rival, la Arandina, se plantaba en el José Luis Saso como un equipo en apuros, propio de la zona baja. Sin embargo, durante la primera mitad el espectador no podía saber si realmente el Parquesol era el equipo de la zona de arriba y la Arandina, el de la zona baja. Más bien parecía lo contrario. Se alcanzaba el descanso con una diferencia de 1-3, a favor de los visitantes, con gol de su portero incluido. El descanso transformó las ideas del equipo local, eso sí, después de tres minutos y el cuarto gol de la Arandina.
Ahora sí, comenzaría la remontada épica de los chicos de Mario Prieto. El gol de Saéz parecía dar vida a los locales y sus compañeros se lo creyeron. Primero fue Rubi, el que metía a los suyos en el partido con el 3-4, y después Raty, consiguió el empate. El lateral, que ya había conseguido anotar antes, volvió a marcar con su pierna zurda, la menos buena.
Con la locura del empate, hubo varias oportunidades de ida y vuelta para ambos equipos que quedaron en segundo plano tras una jugada individual de Rubi en la que fue objeto de una zancadilla y penalizada por penalti. Él mismo, fue el encargado de transformar la pena máxima para delirio de sus compañeros, entrenadores y espectadores. Con la victoria, el Parquesol sigue la estela de la cabeza de la tabla con veinticinco puntos. El próximo rival será la Peña de León, en La Palomera, duro encuentro para los vallisoletanos.
No pudo ser. El Betis visitaba tierras leonesas para medirse al Puente Castro B, un duelo directo entre los dos últimos clasificados que se saldó con la victoria local. Ambos equipos llegaban con el mismo balance de resultados: una victoria, tres empates y ocho derrotas; por lo que la igualdad –dentro de la negatividad- estaba presente en el encuentro.
Pese a ello, el Betis no fue capaz de solventar su crisis. Pese a la debilidad del rival, y a que los locales tampoco tuvieron el día ya que de haber sido de otra forma, el resultado podría haber sido más abultado. La primera ocasión del partido para los leoneses llegó a la media hora de partido y se convirtió en el primer gol, obra de Pablo. Además, el Puente Castro pudo haber incrementado su ventaja si no hubiese desaprovechado una pena máxima que le hubiera permitido sentenciar definitivamente el partido.
Pese al mal hacer de ambos equipos, el Betis lo intentó. En un error del rival, Darío consiguió igualar el encuentro. Lo que simplemente sería un espejismo ya que a los dos minutos, Adrián volvía a anotar para los locales y dejar el partido decantado para los suyos aunque aún quedaba media hora de partido. Treinta minutos en los que no sucedió nada y que dejan los tres puntos en El Golpejar.
Con la derrota, el Betis vuelve a la posición de colista con solo seis puntos en prácticamente toda la primera vuelta. Su próximo rival, también será directo, y será una de las finales que los verdiblancos tendrán que superar para poder seguir soñando con la permanencia. Será en su campo, Finca Canterac, ante el conjunto soriano del Calasanz.
Tampoco pudo ser. El Juvenil B del Real Valladolid se está convirtiendo en el otro equipo de las malas noticias de la Liga Nacional. Cierto es que tenía un duro encuentro en el Alfonso San Casto, ante uno de los rivales más potentes de la categoría, el Santa Marta. Pero las excusas con este equipo se acaban cuando se mira la tabla de la clasificación y se le encuentra en la zona baja de la misma, con tan solo tres puntos de ventaja sobre el descenso.
Si echamos la vista atrás, el año pasado el equipo de Paco de la Fuente a estas mismas alturas, tenía los mismos puntos: catorce. No obstante, la segunda vuelta del Juvenil B fue muy buena y a día de hoy, no parece posible tal atisbo de reacción. En el último partido se tuteó a un rival potente pero no fue suficiente para sacar algo positivo y ya se acumulan seis jornadas sin conseguir ganar.
Además el partido fue cruel con los vallisoletanos. Un cabezazo en el minuto 90 del pichichi de la categoría, Ángel Lerma, dio los tres puntos al Santa Marta. Antes del tanto definitivo hubo otros dos goles que llegaron en la segunda mitad. Primero, Montes adelantaba al Santa Marta cuando se llevaban disputados cinco minutos de la reanudación. El empate blanquivioleta llegó de las botas del zamorano Raúl pero quedó en balde tras el definitivo tanto de Lerma.
Se esfuman las oportunidades de sumar y el Juvenil B está a tres puntos del descenso a Juvenil Regional. La capacidad de este equipo le obliga a exigirse estar más arriba, mucho más arriba de los puestos que ocupa actualmente. La siguiente oportunidad para ello será en Los Anexos, ante otro equipo irregular como es la Cultural Leonesa.