
Los jugadores del Real Valladolid comenzaron el pasado viernes los entrenamientos, y desde entonces saltan a los Anexos por la mañana a las 10 y por la tarde a las siete y media.
En el entrenamiento matutino de ayer de unas dos horas, Djukic hizo especial hincapié en aspectos tácticos defensivos, conceptos importantes en los primeros días de pretemporada.
Héctor Font no pudo realizar la sesión puesto que sigue recuperándose de su lesión en el hombro. El doctor Pablo Grande ha establecido un plan especial para los lesionados con el fin de que vuelvan lo antes posible con el grupo y en las mejores condiciones. Por su parte, Víctor Pérez y Jaime Jiménez se sometieron a las típicas pruebas de esfuerzo de principios de pretemporada.
Tras el entrenamiento de por la mañana, los canteranos Toni y Felipe comparecieron ante los medios de comunicación donde aseguraron estar muy ilusionados y agradecidos. También pasó por los ‘micros’ Manucho. El angoleño expresó su deseo de quedarse en la disciplina blanquivioleta y ayudar al club a subir a Primera.
Por la tarde no solo se entrenaba el primer equipo. El filial comenzó su pretemporada con un entrenamiento al que quisieron asistir Javi Baraja y Djukic y dedicar unas palabras a los pupilos de Javi Torres Gómez.
Esta semana el plan seguirá siendo el mismo: entrenamientos matutinos y vespertinos hasta el próximo sábado, cuando el Real Valladolid se enfrente al Íscar a las ocho de la tarde.