El conjunto bilbaíno estrena estadio y proyecto. El Viejo San Mamés ya es historia, al igual que Bielsa. Valverde capitaneará la nave rojiblanca con muchas caras nuevas.
Si algo no funciona hay que cambiarlo. El Athletic de Bilbao pasó por la Liga BBVA con más pena que gloria, al igual que por la Europa League y por la Copa del Rey. Los bilbaínos necesitaban un cambio para rememorar tiempos no muy lejanos. Dicho y hecho. Entrenador nuevo, estrella nueva y campo nuevo. Es como si una bruja les hubiera aconsejado una nueva vida para esta temporada.
La directiva rojiblanca decidió no ofrecer la renovación a Bielsa. El argentino dio una de cal y otra de arena en las dos campañas que estuvo al frente del Athletic. Tras lo ocurrido en la primera, la parroquia bilbaína esperaba que la segunda fuera, como poco, igual que la anterior. No fue así, ni mucho menos. Después de alcanzar las finales en la Copa del Rey y en la Europa League, las expectativas eran altas.
El mal ambiente reinó desde el principio de la temporada. Con Fernando Llorente siempre en el punto de mira, el Athletic perdió su mejor referencia ofensiva. ‘El León’ no contó tanto como esperaba, aunque en algunas ocasiones apareció cuando su equipo más lo necesitaba. Sin la estrella es difícil brillar. El conflicto del riojano afectó al ánimo de la plantilla, que no recuperó la seña de identidad que tantas alegrías le había dado la campaña anterior.
Tras empezar de forma irregular la Liga, llegaron los mazazos en el resto de competiciones. Las esperanzas puestas en la Europa League se comenzaron a disipar desde el principio. El Athletic no pasó de la fase de grupos al conseguir dos puntos en seis partidos. Pero, entre medias, también fueron eliminados en Copa ante el Eibar, de Segunda División B. Los peores augurios se cumplían para el conjunto rojiblanco.
Fuera de los torneos coperos, todas las ilusiones pasaban por lograr la clasificación para disputar competición europea la temporada siguiente. Los leones solo se tenían que centrar en la Liga para ello. Pero cuando las cosas empiezan mal, suelen terminar de la misma manera. El Athletic volvió a ser el equipo de años atrás, el que finalizaba más cerca del descenso que de Europa.
Los fantasmas del pasado resurgían en San Mamés. Lógicamente, el cuadro vizcaíno no quería que eso volviera a ocurrir. Por ello tomaron la decisión de hacer un cambio radical. El campo nuevo se estrenaba este curso y deseaban hacerlo de la mejor manera posible. Marcelo Bielsa y Fernando Llorente ya no siguen; no pisarán San Mamés Barria para defender los colores del Athletic Club, al menos por ahora.
El míster argentino no terminaba de convencer para continuar y la situación animaba a que su puesto lo ocupara otro entrenador. Urrutia, el presidente, pensó en un hombre de la casa. El nombre, Ernesto Valverde. El delantero, por su parte, tenía ganas de salir del club después del calvario sufrido en el último año. Ahora, en la Juventus, piensa en recuperar su olfato goleador y volver a demostrar lo que vale.
Para esta nueva temporada, el Athletic busca ser un león indomable. Los rojiblancos esperan que todas las permutas realizadas en los últimos meses tengan su fruto. Olvidar la anterior campaña es el primer objetivo. Recuperar el estilo de un equipo fuerte, el segundo. El tercero, sembrar un campo para que este nuevo proyecto dure lo máximo posible. Con buenos resultados, claro.
Tres tenores
Iker Muniain (Pamplona, 1992). El joven atacante vuelve a ser fundamental para el equipo. Su electricidad y entrega en cada partido es una de las virtudes del juego ofensivo del Athletic. Al igual que el personaje de dibujos animados Bart Simpson, él es el chico malo de la plantilla.
La garra y el empeño con los que disputa el balón es un quebradero de cabeza para los rivales. Muniain quiere seguir creciendo. Pese a su juventud, ha disputado muchos partidos importantes y el proyecto del club se basa en jugadores como él, que den todo por sus colores.
Markel Susaeta (Guipúzcoa, 1987). Pese a no ser delantero, fue el segundo máximo goleador del equipo la temporada pasada. Su mayor virtud es la llegada desde atrás. Los defensas rivales no saben frenar sus embestidas y el donostiarra aprovecha su técnica para perforar la portería contraria.
Valverde quiere que vuelva a ser un jugador importante a la hora de atacar. Es una alternativa ofensiva que ha dado y dará muchas alegrías a los bilbaínos. Además, posee un potente disparo que no es solo fuerza, sino que el misil va dirigido a conciencia hacia el gol.
Aritz Aduriz (Guipúzcoa, 1981). El delantero donostiarra tendrá más galones que el curso anterior. Tras la marcha de Fernando Llorente, el exblanquivioleta se presume como la mayor referencia ofensiva del Athletic. La temporada pasada ya fue el máximo goleador del equipo con catorce tantos.
Kike Sola será su competidor por el puesto de delantero, pero, en principio, Valverde apuesta por un Aduriz con hambre de gol. Él también es consciente de que el equipo no puede repetir la actuación de la anterior campaña. Sus 31 años no le han hecho perder el olfato goleador que le ha caracterizado siempre. Con buen juego de pies y aéreo, el Athletic apuesta al ’20’.
El fichaje estrella
Beñat Etxebarria (Vizcaya, 1987). Un nuevo proyecto requiere de nombres, y hombres, importantes. Después de varias temporadas en el Betis demostrando su clase, el centrocampista regresa a su tierra para defender los colores del equipo que lo vio crecer.
Ahora es Beñat la estrella de un Athletic que necesitaba un jugador como él. Si algo acusó el conjunto rojiblanco la temporada pasada fue oxígeno en el medio del campo, alguien que mimara el balón y surtiera de balones a los hombres de ataque. Ese es él, que regresa a casa para intentar devolver la ilusión al equipo.
El míster
También había que cambiar de entrenador. La no renovación de Marcelo Bielsa abrió la puerta a Ernesto Valverde (Cáceres, 1964). El presidente del Athletic Club decidió recurrir a él para capitanear este nuevo proyecto. Un hombre de la casa, curtido en mil batallas y con la misma ilusión que la primera vez que dirigió a los leones.
‘El Txingurri’ quiere hacer de su equipo lo que hizo con el Olympiakos en su etapa en Grecia, colocarlo lo más alto posible. Con las incorporaciones de este mercado estival, Valverde peleará por tener el balón, ser fuerte defensivamente y cerrar los partidos a la contra.
Fichajes y salidas
Altas: Mikel Balenziaga (Real Valladolid), Beñat (Real Betis), Kike Sola (Osasuna) y Mikel Rico (Granada).
Bajas: Aurtenetxe (Celta de Vigo), F. Amorebieta (Fulham), Igor Martínez (Mirandés), Iñigo Pérez (Mallorca), Isma López (Sporting de Gijón), F. Llorente (Juventus), J. Ramalho (Girona), R. Fernández (Numancia), Ruiz de Galarreta (Mirandés) y X. Castillo (UD Las Palmas).