Fernando Vázquez ha conseguido que el Deportivo de La Coruña esté a tan solo un punto de la salvación después de que el equipo estuviera al borde del abismo.

Cuando todo indicaba que el Deportivo de La Coruña, con un fútbol pobre, malos resultados y dos entrenadores –José Luis Oltra y Domingos Paciencia- que no consiguieron que el equipo carburara estaba abocado al abismo de la Segunda División, llegó él, Fernando Vázquez, un hombre que ha conseguido dieciséis de los treinta puntos que se han disputado desde su llegada.
Cuando se anuncio el fichaje de ‘Harry Potter’ como técnico del club gallego, muchos fantasmas del pasado rondaron por la cabeza de algún que otro deportivista. El Deportivo de La Coruña estaba en muerte súbita y los últimos resultados deportivos de su nuevo entrenador se traducían en descensos, exactamente cuatro, entre, 2001 y 2007, con Las Palmas, Rayo Vallecano, Real Valladolid y Celta de Vigo –en los tres últimos fue destituido antes de que se consumara la caída-.
Pero, pese a estos precedentes, el Depor ha mejorado notablemente desde la llegada de Vázquez. Se hizo cargo del equipo por primera vez en la jornada veintitrés para enfrentarse el Real Madrid y los blanquiazules cayeron derrotados por un gol a dos, pero las sensaciones del equipo fueron totalmente distintas a las de partidos anteriores.
Desde la jornada de su debut y hasta la fecha se han disputado un total de treinta puntos, de los cuales el Deportivo ha conseguido sumar dieciséis, es decir más de la mitad. Las cuatro victorias consecutivas que consiguió (tres de ellas ante rivales directos: Zaragoza, Celta y Mallorca), más los cuatro empates cosechados le han permitido colocarse a tan solo un punto del descenso. La otra derrota que ha sufrido Vázquez ha sido contra el Barça.
A Fernando Vázquez le restan cuatro jornadas para obrar el ‘milagro’ de dejar al Deportivo de La Coruña un año más en la máxima categoría del fútbol español (al menos en lo que atañe a lo deportivo, los despachos son otra cosa). A Zorrilla llega en puestos de descenso, decimoctavo con 32 puntos, y con los blanquivioletas deseando sellar la permanencia de forma matemática.
Espanyol, Málaga y Real Sociedad son los otros tres rivales a los que tiene que presentar batalla para conseguir el ansiado premio de la salvación. El primero poco o nada se juega –está salvado y no opta a competición europea- mientras que malacitanos y donostiarras están inmersos en la lucha por alcanzar un puesto en alguna de las dos competiciones europeas.
Como por arte de magia el entrenador de los herculinos ha conseguido que su equipo se reconcilie con el fútbol, los resultados y la afición de la noche de la mañana. Y, de paso, ha hecho que los fantasmas de sus descensos y de su pasado en el máximo rival se hayan esfumado. Con solvencia y eficiencia, como tocado por una varita. Y en solo cuatro meses.