Ali Carranza volvió a marcar en competición oficial con el CD Parquesol tras siete meses sin ver puerta

Ali Carranza, máxima goleadora del CD Parquesol la pasada temporada, volvió a ver salir el sol. Y es que la delantera del conjunto naranja marcó después de siete meses de sequía goleadora en competición oficial. Además, la ‘nueve’ volvió por la puerta grande, con un doblete ante el Real Oviedo Femenino, uno de los equipos llamados a estar arriba en la Segunda Pro.
Su último tanto en liga fue el pasado trece de abril. El partido se disputó en la Ciudad Deportiva del Rayo Vallecano ante el filial del conjunto franjirrojo. Tras encajar pronto, Barbi se inventó una genialidad para que la atacante dejara su sello y empatara. Finalmente, las vallecanas vencieron por dos a uno.
De igual forma, marcó en pretemporada, cuando vio puerta en numerosas ocasiones. La última fue el veinticuatro de agosto en la penúltima cita de la pretemporada, precisamente ante el rival de este fin de semana: el Real Oviedo. Tras empezar perdiendo el choque, Ali perforó la meta de las azules gracias a su asociación con Yarima. Pese al empate, el partido se decantó para las carbayonas por dos a cinco.
Sin embargo, esta temporada comenzó de manera aciaga. A pesar de comenzar ganando en Mareo ante el Sporting, a las chicas de Rubén Jiménez les faltó el gol. La sequía se hizo efectiva entre las jornadas cuatro y ocho en las que el Parquesol acumuló de 436 minutos sin ver puerta. Pero Nata se encargó de devolver el olfato a las delanteras.
Esto nos trae hasta la actualidad. El pasado domingo, las naranjas visitaban San Gregorio con la intención de llevarse los tres puntos contra el Real Oviedo Femenino. Pero había una jugadora que quería más, que lo que buscaba era encontrar que hacer para darle color. Y lo consiguió.
Pasado el ecuador de la primera mitad, con una lluvia característica de las tierras asturianas y perdiendo uno a cero, Ali sonrió otra vez. La que fuera máxima goleadora del equipo la pasada temporada presionó a Alba Hoyas y la guardameta azul se hizo un lío, del cual se aprovechó. Disparó y empató la contienda, mientras sus compañeras se acercaban a celebrarlo, sabedoras de la importancia del tanto.
En los primeros compases del segundo acto volvió a demostrar sus ganas de resarcirse y ahuyentar fantasmas. Barbi inició la jugada abriendo a banda para Sandra Pascual. La ‘7’ caracoleó por la banda y probó fortuna, pero el balón salió largo. Y en el segundo palo apareció la delantera. Empujó el balón y se produjo la misma imagen: todo el equipo fue corriendo a abrazar a la protagonista del partido en la capital asturiana.
A medida que iban transcurriendo los últimos 45 minutos, la ciudad cayó bajo el hechizo de la naranja. Cuando la árbitra decretó el final, la localidad ya se había rendido y la lluvia había cesado. Todo ello para dejar claro que los nubarrones no importan, que todos los días sale el sol, ‘Aligol’.