Los blanquivioletas vencieron por cinco a dos a los pepineros en un partido con más contundencia que juego

Foto: Javier Canal
El Real Valladolid sigue con su buena racha y ya acumula cuatro partidos seguidos sin perder. Los de Ricardo López sufrieron por momentos para vencer al CD Leganés, pero Slavy se puso el calzón y los guantes y decantó el combate cuando más lo necesitaban los suyos con un potente cabezazo, consiguiendo una reacción en cadena que propició el cinco a dos definitivo.
Los primeros compases del encuentro tuvieron su simil pugilístico, ya que ambos equipos se fueron midiendo poco a poco, al igual que hacen los boxeadores esperando a que alguno de los dos dé el primer golpe.
Los blanquivioletas se convirtieron en ese púgil que poco a poco aguanta para desgastar al contrario; en este caso, a través del dominio de la posesión. Mientras, los pepineros fueron ese luchador joven con prisas que tiene ganas de noquear al contrario, ya que sus intentos combinativos eran incisivos, pero precipitados.
La primera esquiva fue de los madrileños. Maroto botó una falta desde el lateral que detuvo Álvaro sin complicaciones. Sin embargo, el siguiente golpe no lo vieron venir e Iker aprovechó un despiste para batir al guardameta blanquiazul y poner el uno a cero en el marcador.
No habían pasado ni dos minutos cuando el Pucela volvió a encontrarse con el gol. Maroto se la pasó a Castri con una genialidad y el ’11’ no falló ante el cancerbero visitante para aumentar la ventaja hasta el dos a cero.
Cuando parecía que el Lega ya besaba la lona, aparecieron dos protagonistas para abrazarse y coger aire para los suyos: Amis y Navarro. De esta dupla el mayor damnificado fue Iker, que vio como primero le desbordaban en banda y luego le presionaban para robar el balón y hacer la misma jugada: pase desde el lateral del extremo que remataba el ’10’ pepinero a placer ante Miguel.
En diez minutos, los blanquiazules habían dado un vuelco a la contienda e igualado las tornas. Pero apareció la fuerza búlgara de Huesca para derrotar a los madrileños. Slavy le dio al CD Leganés el gancho definitivo, que en su caso fue un cabezazo tras un pase de Iker, y envió el choque al descanso con un tres a dos en el casillero.
Tras el primer asalto, se dio paso al segundo, que fue más frío y calculado que el anterior. Ambos conjuntos se movían por el ‘ring’ verde de los Anexos esperando el fallo del adversario. Pero a los visitantes se les hacía larga la espera, así que pasaron a buscar las flaquezas de los vallisoletanos.
Sin embargo, el Pucela se mantuvo estoico y supo mantener los tempos. Y fue ahí cuando decidió cambiar la guardia y pasar a un juego basado en la rapidez en vez de aguantar la posesión. Los resultados se tradujeron en ocasiones, como la de Diego Iglesias, cercana a la hora de encuentro, en la que Álvaro no dudó y desbarató la ocasión.
Poco a poco, el partido entró en un punto de no retorno donde no se terminaba de ver juego ni goles. Ambos equipos decidieron hacer un ‘clinch’, cogiendo así aire para los últimos minutos.
Fue en esos compases en los que nadie se esperaba nada más cuando volvió a aparecer el ‘9’ para terminar de derribar al Lega. Se plantó delante del guardameta albiazul y buscó conectar dos veces el golpe. El ‘directo’ lo detuvo sin complicaciones el cancerbero, pero el ‘crochet’ no lo vio venir y Slavy puso el cuatro a dos.
La renta de los dos goles dio tranquilidad a los de Ricardo, pero los pepineros decidieron realizar un último intento a la desesperada. Souccess se plantó en el área e intentó anotar, pero Miguel cubrió bien la portería haciéndose grande y sostuvo a su equipo.
En el último tramo, los madrileños estaban con la guardia baja. Ese factor lo aprovechó Roberto Laurel para enviar al CD Leganés ‘a dormir’, como hubiera dicho Héctor del Mar. Al recién incorporado le bastaron cuatro minutos para disparar desde la frontal y sellar los tres puntos.
El árbitro del combate, Alba Gallego, contó hasta noventa y tres, en vez de hasta diez, y pitó el final y el sonido de su silbato, en vez del de la campana, significó que la buena racha del Real Valladolid se prolonga hasta las cuatro victorias consecutivas, lo que le permite seguir tercero en la tabla.
Real Valladolid: Miguel; Iker, Palomeque, Héctor Blanco, Casado; Castri (Camilo, min. 77), Diego Iglesias (Prada, min. 60), Javi Díez, Maroto (Roberto Laurel, min. 84), Carrión (Cadaveira, min. 77); y Slavy.
CD Leganés: Álvaro; Alberto, Tahif, Jacopo, Chava (Mario, min. 56); Rentero, Expósito (Toti, min. 81); Naim (Souccess, min. 60), Navarro (Navil, min. 77), Amis; José.
Goles: 1-0, min. 16: Iker; 2-0, min. 18: Castri; 2-1, min. 22: Navarro; 2-2, min. 33: Navarro; 3-2, min. 40: Slavy; 4-2, min. 75: Slavy; 5-2, min. 88: Roberto Laurel.
Árbitro: Alba Gallego, del colegio castellano y leonés, asistido en bandas por Ruiz Martínez y López García. Amonestó a los locales Iker y Diego Iglesias y al visitante Expósito.
Incidencias: Partido correspondiente a la jornada 8 en el grupo V de División de Honor, disputado en Los Anexos ante unos cien espectadores.