El madrileño se enfrentará al que fue su equipo este sábado en el primer partido para el Real Valladolid en el 2019 y con la mente siempre puesta en la permanencia
Entrados en un nuevo año pero persiguiendo el mismo objetivo: la salvación. Así de claro se mostró Nacho Martínez en la primera rueda de prensa del recién estrenado 2019. Para conseguir el propósito más codiciado, el encuentro ante el Rayo Vallecano el sábado cinco a las 13:00 horas, es crucial. Los vallecanos están en la antepenúltima posición, a ocho puntos del Pucela, pero vienen de ganar en la última jornada.
Y es que el partido ante los de Míchel, pese a tirar de tópico, son más que tres puntos. Aun así, el lateral no pierde el sueño ante una posible derrota. «Lo veo un partido importante, como todos. Son tres puntos y las distancias no son definitivas, quedan dos encuentros de la primera vuelta y toda la segunda. Igual que se las distancias se alargan se pueden acortar», reconocía el futbolista ante los medios.
Además de la importancia del partido, el choque ante el equipo de la franja será especial para el madrileño, por enfrentarse al que fue su club durante cinco años. «Sí que es especial porque tengo amigos y conocidos allí, pero dentro del campo quieres los tres puntos», agregó.
«Son un equipo que apuesta por salir jugando desde atrás, tienen muchos puntos fuertes, y nadie se imaginaba que podían estar abajo, aunque pueden salir», comentó, antes de explicar que el plan para los de Sergio González está claro. «Debemos debilitar sus puntos fuertes y no pensar que está hecho. No va a ser fácil. Si nos dormimos, como ante el Leganés, nos van a tocar la cara», avisó.
El máximo deseo para Nacho y que pide a este nuevo año es mantenerse en Primera División: «Pido que sigamos igual, con salud y que nos salvemos lo antes posible. Y si tiene que ser en la última jornada también, pero que nos salvemos, es lo que el club se merece». Además, reconoció que el parón navideño les ha sentado muy bien. «Sirve para desconectar, recargar las pilas y limpiar la mente. Ahora tenemos que poner la máquina al día porque la competición no da tregua«, finalizó.