El gallego reconoce la importancia de conseguir los tres puntos ante el Leganés y se moja respecto a las intervenciones del VAR

Después de alcanzar 100 partidos en la máxima categoría con el Real Valladolid y ser titular en la derrota ante el Sevilla por 1-0, Borja Fernández ya mira al Leganés, próximo rival en Zorrilla, el sábado a las 16:15 horas. «No jugamos los mismos punto que en el Sánchez-Pizjuán, aunque al ser un rival directo da un plus a mayores si conseguimos la victoria. Volveríamos a ganar y a sumar tres puntos, por eso es tan importante«, reconocía el mediocentro ante la prensa.
Lo cierto es que tras cuatro partidos ganando se ha pasado a cuatro encuentros sin conocer la victoria. Aun así, el’8′ no piensa en rachas. «No pensamos en eso. Sabíamos que ganar cuatro seguidos era complicadísimo. Tenemos que competir como lo estamos haciendo y los resultados llegarán. Pasito a pasito debemos conseguir los puntos para salvarnos», aseveró.
Con todo, en la presente temporada la liga está siendo de lo más imprevisible y quién se quemará al final de temporada con el descenso a la categoría de plata parece algo difícil de acertar.
«Los tres grandes no están ganando todo como solían hacerlo y eso quitaba muchos puntos. Los de abajo suman ante los de arriba y si esto sigue así, la salvación será muy cara», alegó el mediocentro. Sobre las intervenciones del VAR en lo que llevamos de campaña, Borja fue muy claro: «A mí no me gusta porque se ven diferencias de criterios, no hacia unos u otros, sino de jugadas idénticas que una se revisan y otras no. Ojalá se puedan corregir».
El gallego volvió a ser titular tras más de dos meses, desde el 3-3 ante el Celta de Vigo en Balaídos, sin saltar al césped desde el once inicial. «Anímicamente no estoy mal. Me gustaría jugar más, pero me encuentro bien, disfrutando mucho este año después de todo lo que hemos pasado en los anteriores. Ojalá jugara todo, pero disfruto de estar con el Real Valladolid en Primera División«.
El pequeño bajón de rendimiento de la sala de máquinas del Pucela puede abrirle de nuevo la posibilidad de partir de inicio ante el conjunto pepinero. «Hemos estado a un gran nivel y nos han acompañado los resultados. Ahora que no ganamos parece que hemos bajado. En Sevilla competimos aunque no pudimos sacar nada positivo. Para el siguiente esperaré mi oportunidad. Para eso me preparo», comentó.
Y es que todavía se trata de buscar una explicación a la primera parte en el Pizjuán, donde se vio a un Real Valladolid más incómodo de lo habitual. «En general no nos adaptamos bien, pero no por el sistema, sino por un desajuste de todos. Defensivamente estuvimos correctos, llegábamos a las ayudas, aunque ofensivamente nos costó crear más peligro, aunque nos costó más que otros días», arguyó el centrocampista.
Sobre sus 100 encuentros, tantos partidos dan para mucho, Borja tiene muchas historias grabadas en la memoria, con momentos de alegría, y también de tristeza. «El mejor recuerdo lo tengo del primer partido que jugué con el Pucela, que ganamos 0-1 al Espanyol con gol de Joseba Llorente. Veníamos de batir el récord en Segunda y se decía que a la plantilla le faltaba cosas. Demostramos que sí que valíamos. Después vino el partido ante el Real Madrid con el gol de Pedro López, que fue mi mejor partido como profesional», rememoró Borja.
Y, sin duda, uno de los peores momentos fue el descenso del año 2010, aunque no solo el último encuentro donde se confirmó, ante el Barça en el Camp Nou, sino todo el año. «Lo recuerdo con muy mal sabor de boca, fuimos a Barcelona prácticamente sentenciados», finalizó.