Aunque formará parte de la disciplina del Juvenil B, el mediocentro gallego está entrenando con el equipo de División de Honor

La cantera blanquivioleta tiene una cara nueva en este mercado invernal que podría debutar este mismo fin de semana. Se trata de Álex Ramos, juvenil de primer año procedente de la base del Espanyol y que reforzará la medular del Real Valladolid de Liga Nacional aunque no se descarta que pudiera alternar con el equipo de División de Honor dada su demarcación.
Ramos, de origen gallego, se formó en el Montañeros antes de captar la atención del Celta de Vigo, que le incorporó a su Infantil A. Su breve paso por la cantera celeste –en la que tan solo estuvo en esa temporada– dio paso a su estancia en el RCD Espanyol. Se incorporó al Cadete B del club perico y ha formado parte de su estructura hasta la actualidad, llegando a ser campeón regional el curso pasado por delante del FC Barcelona.
Su desvinculación llega después de haber disputado seis partidos en la Liga Nacional catalana con el conjunto blanquiazul. Álex formó parte del equipo titular en tres ocasiones y otras tres tuvo que iniciar desde el banquillo. De esta forma, como revulsivo, logró ver puerta frente al Josep María Gené, siendo así el último tanto de Álex Ramos con la camiseta del Espanyol.
En su andadura como blanquivioleta, Ramos podría alternar los dos equipos juveniles. Las circunstancias de lesiones del plantel de División de Honor en el medio del campo podrían permitirlo, ya que Bruno se perderá el resto de la temporada aunque Rivera está ultimando su proceso de recuperación.
Por lo tanto, la nueva incorporación se encuentra ante una buena oportunidad, no solo de disputar minutos con el Juvenil B del Real Valladolid sino también podría hacerlo con el División de Honor. Eso sí, no será nada fácil puesto que hay competencia interna fuerte en los dos conjuntos blanquivioletas.