El director deportivo del Real Valladolid compareció en rueda de prensa tras su renovación al frente de esta parcela hasta el año 2019

Hace ya varios días, el Real Valladolid hacía oficial la renovación de la dirección deportiva, con Braulio Vázquez a la cabeza, acompañado por Cata y Domingo Catoira. Pero no ha sido este martes cuando la principal pieza de esta parcela del club ha comparecido ante los medios de comunicación, junto con el presidente, Carlos Suárez.
Como suele ser habitual en estos casos, el gallego comenzó su intervención agradeciendo la confianza que ha depositado en él y en su equipo Carlos Suárez, y también quiso dar las gracias a gente del club, a los que también considera «amigos».
Con su renovación hasta 2019, la dirección deportiva finaliza su contrato a la par que gran parte de los jugadores que él mismo ha firmado este verano. «Es bueno ligar los caminos de los futbolistas. El proyecto del año que viene no será tan nuevo porque ya tenemos una base importante, no tienes que fichar diecisiete jugadores, a no ser que el club tenga que vender», reconoció sobre un futuro a medio plazo.
Algo que puede darse en un tiempo más próximo es la renovación de Paco Herrera. El propio entrenador ya comentó la semana pasada que comenzaba a ser feliz en Valladolid y que ese momento llegaría cuando lo tuviera que hacer, pero ya hay conversaciones activas entre todas las partes. «Con Paco Herrera estamos de acuerdo y tenemos convencimiento pleno en él. Si todo va normal, seguirá. Estoy muy contento con el proyecto que tenemos«, subrayó Braulio.
Que todo marche correctamente es importante, no solo para la renovación del técnico, también para la tranquilidad de todos de cara al inicio de la segunda vuelta y del mercado invernal. «No tenemos ni un duro, así que el margen de error es nulo», dijo, aunque sí comentó que está «estudiando el mercado» para ir «anticipando algunos jugadores de cara al futuro».
«Hay que trabajar con mucha antelación para que venga la gente. Es más, hay equipos con nuestros mismos objetivos que quieren a jugadores nuestros que aquí apenas están jugando», afirmó con respecto a la importancia del trabajo previo y el peso de una entidad como es el Real Valladolid. Más, teniendo en cuenta que el presupuesto ha sido de 6.4 millones de euros, menos de la mitad que tienen otros conjuntos como por ejemplo, los recién descendidos.
Y si hay otra renovación que también está trayendo cola es la de Juan Villar. El onubense finaliza contrato en junio de 2017 y su futuro está en el aire. «El presidente y yo ya le hemos dado un borrador tanto al jugador como a su agente de lo que sabemos, pero no hemos tenido respuesta«, apuntó. La ampliación de contrato más factible y más próxima es la de Javi Moyano, quien seguirá vinculado al Real Valladolid en cuanto juegue «veintiún partidos».
Ahora sí era el momento

Braulio Vázquez hizo un repaso cronológico del proceso de su renovación: «El presidente me la ofreció en Las Palmas, después de caer en el play-off, pero no era el momento. El año pasado fue muy malo y no me veía con legitimidad moral como para aceptarlo. Creo que hubo decisiones no correctas, aunque no hay malos jugadores, hay malos rendimientos, se está viendo este año».
Las cosas, esta vez, son diferentes. «Ahora creo que hemos hecho un gran trabajo y estoy muy satisfecho de la plantilla y del cuerpo técnico, independientemente de dónde quedemos», matizó.
El mal rendimiento de muchos futbolistas el año pasado desembocó en una apatía generalizada y con el equipo al borde del descenso.
Por eso, Braulio solo considera «fracaso» la campaña anterior, aunque no se arrepiente de la mayoría de cosas que hizo ni tampoco cree que sea un fracaso no haber conseguido el ascenso en los años que lleva en Valladolid. «Lo más difícil en el fútbol es tomar decisiones y fracaso es no tomarlas», apuntó.
Dice Braulio que esa «satisfacción personal» va «más allá de los resultados» porque se sabe el trabajo que hay detrás, que no es fruto de dos días. «Hay operaciones hechas con mucho tiempo, por eso hay jugadores que están aquí. Las cosas se han hecho como se deben hacer», comentó orgulloso.
Eso sí, esto no quiere decir que su historial este año sea inmaculado y él mismo reconoce que puede haber «algún fallo». «Es imposible no tenerlo, hemos fichado diecisiete jugadores nuevos. Pero hemos hecho contratos largos, hemos subido a gente del filial, mejor dicho, se han subido solos… y noto por la calle que la gente está orgullosa del equipo que tiene y que la gente viene ilusionada», afirmó.
Esa ilusión viene reforzada por el giro que está dando el tratamiento de la cantera, en parte, gracias al trabajo de Cata. Braulio se mostró «encantado» con el filial y los conjuntos inferiores, pese a haber reducido el presupuesto. «Rodearse de gente como Cata y Domingo te ayuda a la captación; los mejores jugadores de Castilla y León tienen que estar con nosotros. A nivel competitivo y de la mejora individual creo que han crecido», aclaró.