Tras la baja de Pelayo, los siguientes en abandonar el filial podrían ser el palentino y el vallisoletano

La pretemporada del filial del Real Valladolid comenzó en la tarde del martes. Para los seis juveniles se trata de una oportunidad de demostrar a Rubén Albés sus cualidades y que, por tanto, tratarán de aprovechar al máximo. Misma situación aunque incluso con mayor intensidad para el colombiano José Luis Sinisterra, que se encuentra a prueba y debe convencer en el menor tiempo posible.
Pero no solo para ellos es importante la pretemporada. Los propios jugadores del filial quieren demostrar desde el primer día que quieren ser importantes para el técnico durante la temporada regular. No obstante, en el primer día de entrenamiento se conoció las intenciones del club de intentar encontrar acomodo tanto al palentino Adrián como al delantero vallisoletano Isma Casado.
Tanto Adri como Chino afrontan su segunda temporada en la etapa senior y previsiblemente no jugarán vestidos de blanquivioletas. Ninguno de los dos jugadores, que ingresaron en el club en etapa cadete, cumplirá un año más vistiendo la elástica que más temporadas han defendido y tendrán que pelear su futuro deportivo lejos de Los Anexos, algo que ya se había anunciado con Javier Pelayo.
Adrián disputó 418 minutos con el filial repartidos en diecinueve partidos, en los que anotó tres goles. Apenas tuvo continuidad, puesto que solo gozó de tres titularidades en el curso completo, un corto bagaje para el jugador que venía de ser el más destacado en el último año de la etapa juvenil en la que anotó trece goles a las órdenes de Chuchi Macón, cifra elevada para un jugador acostumbrado a jugar por detrás del punta o incluso como mediocentro.
Por su parte, el vallisoletano ya tuvo que salir cedido la temporada pasada a causa de las pocas opciones de las que había disfrutado en el Promesas. Tras un buen trabajo de pretemporada se ganó la titularidad en la primera jornada de la campaña pasada, pero solo fue un espejismo de la temporada que le esperaba en Los Anexos. Por tanto, en vistas a las pocas oportunidades concedidas en Valladolid optó por la opción de préstamo al Arroyo CP.
Allí trató de devolver al equipo de la localidad de Arroyo de la Luz a la categoría de bronce que había perdido. No obstante, pese a alcanzar el play-off de ascenso, el ascenso no se produjo. En su etapa en el equipo extremeño, disputó trece partidos y anotó dos goles.
Previsiblemente, tanto Adri como Isma Casado harán las maletas antes de tiempo para intentar ganarse fuera, la oportunidad que buscaban en el Real Valladolid. Con ellos se irán las esperanzas de dos canteranos que ingresaron en etapa cadete y que en la presente temporada no tienen ni la opción de poder convencer a Albés en los entrenamientos previos al arranque de la competición.