El lateral incidió en la necesidad de dar una buena imagen en los cuatro encuentros que quedan por disputar, especialmente de cara a la próxima temporada

El Real Valladolid regresó en la mañana de este martes a los entrenamientos, después de disfrutar de una jornada de descanso. El único ausente fue el portugués Tiba, que tuvo que ser sustituido tras un fuerte golpe en el partido contra el Albacete. Alberto López tendrá que esperar a su evolución para decidir si viaja o no a Tenerife junto al resto de sus compañeros.
Precisamente, el partido contra el Albacete ha servido para que la plantilla se libere, en cierta medida, de la tensión acumulada tras siete partidos sin conocer la victoria.
Javi Moyano destacó la importancia de los tres puntos cosechados ante el conjunto manchego. «La dinámica no era buena, los resultados hacían pensar que podía pasar cualquier cosa y todas negativas. Era necesario salir de esa inercia y la victoria fue vital para quitarnos esa carga», reconoció.
El defensa, que tiene contrato en vigor para el curso que viene, subrayó la necesidad de terminar esta temporada de la mejor forma posible. «Queremos sumar los doce puntos restantes y terminar el año en una dinámica positiva que genere ilusión. No valoramos si estamos salvados o no, cualquier cosa puede pasar tanto por arriba como por abajo», avisó Moyano.
A pesar de la victoria conseguida el sábado, un sector de la afición despidió al equipo con una sonora pitada después de los noventa minutos. El lateral manifestó su respeto en lo referente a la opinión de la grada. «Durante todo el partido nos estuvieron apoyando incondicionalmente y dejaron de lado las diferencias con el equipo. Creo que la pitada iba encaminada a la temporada en general; ellos van al estadio y tienen derecho a expresar lo que sienten«, afirmó.
Unos pitos que, en buena parte, pueden venir motivados por la actitud de ciertos jugadores en momentos clave de la temporada. Moyano rompió una lanza a favor de sus compañeros. «La situación de cada uno puede condicionar la forma en que se trabaja. A mí personalmente no me afecta y confío en que a mis compañeros tampoco. Estamos todos para buscar el bien general«, aseguró el lateral.
Un bien general que pasa, en opinión del jienense, por sentar las bases para que la próxima temporada no se vuelvan a repetir los mismos errores. «Lo primero es terminar bien y generar un clima de optimismo de cara al año que viene. Estamos trabajando para que la gente vuelva a creer en el equipo y haya una nueva ilusión. Lo importante es el Valladolid», explicó.
Con respecto al próximo partido contra el Tenerife, Moyano lo vivirá como algo especial, ya que pasó tres años en las filas del club tinerfeño –con el que consiguió el ascenso a Segunda División–. El lateral espera una buena acogida por parte de la afición, aunque dejó claro que sus colores no serán otros que los blanquivioletas. «Espero que sea un buen recibimiento, aunque entenderé que haya gente que no lo comparta. Lo que tengo claro es que una vez que esté en el campo todo quedará de lado y lucharé por los intereses del Valladolid«, sentenció el andaluz.
El Real Valladolid regresará a los entrenamientos este miércoles a puerta cerrada, a partir de las diez y media de la mañana, en el José Zorrilla.