El delantero valenciano pasó por rueda de prensa antes de conocer el castigo impuesto por el Comité de Competición y reconoció que «quizás ha habido cierta relajación» para explicar el actual mal momento del Real Valladolid

El Real Valladolid regresó en la mañana de este miércoles a los entrenamientos en una sesión que tuvo lugar en Los Anexos. La ausencia más destacada en la jornada de trabajo fue la de Miguel Ángel Portugal, que no acudió al entrenamiento por motivos personales. Tampoco estuvo Mojica, aquejado de una contusión, aunque todo indica que llegará a tiempo para entrar en la convocatoria contra Osasuna.
Por su parte, Marcelo Silva y Mario Hermoso –este último fue operado ayer de una fractura en un dedo de la mano derecha– completaron junto al resto de sus compañeros la primera parte del entrenamiento. Completan las ausencias Rennella y Óscar, que trabajaron a buen ritmo, aunque al margen del grupo, y Alfaro, que estuvo en manos de los fisioterapeutas.
Concluida de la sesión, el Comité de Competición de la Federación Española de Fútbol ha dado a conocer las sanciones correspondientes a la pasada jornada del campeonato. Roger Martí ha sido castigado con dos partidos de suspensión por «conducta contraria al buen orden deportivo«, aunque el club ya ha anunciado que recurrirá ante el Comité de Apelación.
Según recoge el acta del partido, al terminar el choque contra el Zaragoza el valenciano propinó una patada a la puerta del vestuario del trío arbitral. A pesar de que los tres integrantes se encontraban dentro del propio vestuario, el acta explica que otros dos integrantes del equipo arbitral se encontraban detrás del jugador en ese momento; explicando de este modo lo sucedido.
«Quizás ha habido algo de relajación»
‘Billy el Niño’ compareció ante los medios antes de conocer su sanción. Sorprendido por «esta mala racha», reconoció que «quizás ha habido algo de relajación» y el equipo ha «bajado la intensidad», única explicación que encuentra al mal momento que atraviesan. Inevitablemente, el vestuario está «fastidiado», ya que «nadie se esperaba estar en esta posición a estas alturas».
El delantero recurrió al discurso manido de que todavía «quedan puntos» y matemáticamente «no hay nada decidido», aunque como ya se ha visto en este portal, la remontada depende de un casi milagro, o como poco de una hombrada histórica. «Somos realistas. Sabemos que está difícil, pero vamos a pelearlo», dijo en este sentido.
Contradiciendo a Nikos, el atacante explicó que cree que les falta «experiencia» y que tiran «la toalla muy pronto» cuando viene una adversidad en forma de gol. «Nos dan un golpe y no sabemos reaccionar; todos somos culpables», manifestó, antes de conocerse «tranquilo» porque «los goles ya llegarán».
Con respecto a los pitos de la afición se mostró comprensivo. «Tienen razón en todo lo que expresan. Nos lo merecemos. No estamos a la altura, sobre todo en casa. Sabemos que hay presión [por ocupar mejores puestos], pero ya sabíamos a dónde veníamos», explicó un jugador que querría «seguir aquí», aunque no depende de él, como se anunció en su día, sino «de si el Levante se queda en Primera o baja a Segunda».