El Real Valladolid Promesas vuelve a Los Anexos, donde recibirá a la Arandina este Jueves Santo a partir de las cinco menos cuarto

Parece que fue ayer –o no–, pero hace casi un mes que el Real Valladolid Promesas no juega en Los Anexos. De hecho, se cumpliría en caso de no ser el próximo partido adelantado a este Jueves Santo. Por el camino, desde que cayó compitiendo ante el líder, fue derrotado por el Coruxo fuera y por el Real Racing Club en Zorrilla y venció en un encuentro vital el pasado sábado en Astorga.
Otra vez toca final, y otra vez toca derbi. Frente a una Arandina que después de cosechar una serie de buenos resultados entre enero y febrero asomó la cabeza fuera de los puestos bajos, si bien llegará a la ribera del Pisuerga después de perder en las dos últimas jornadas, ante Pontevedra y Somozas, en ambos casos por un gol a cero.
No obstante, llega en una situación de desahogo, con 41 puntos, seis más que su rival y nueve por encima del descenso y el play-out. No cabe duda que los ribereños buscarán retomar la buena senda junto al no tan nuevo José Zorrilla, aunque su momento no es tan apremiante como el de un filial obligado a ganar para seguir más o menos alejado del fantasma rojo.
Para este choque, Borja Jiménez recupera a Cristian y Anuar, pero pierde a Mayoral, sancionado para los dos próximos partidos después de su última expulsión. En el caso del central, canario, hay que tener en cuenta que este miércoles no se ejercitó por un problema en el psoas, mientras que Royo, aunque ha entrado en lista, aún está entre algodones, tras sus problemas de rodilla.
Ángel, con un esguince de tobillo, e Higinio, también lesionado, tampoco estarán, ni los juveniles Rubén y Juan, que vuelven con el División de Honor. Es posible, con todo, que Porcar mantenga la titularidad en el lateral izquierdo, con la duda de qué pasará con Cristian. En función de su estado, habrá que ver si sigue Mario Robles en el puesto de central o si por el contrario las cábalas se hacen con la confección del mediocampo.
Los dieciséis citados por Borja Jiménez son precisamente los dieciséis jugadores disponibles (con esas incógnitas sobre el estado de Cristian y Royo): Julio, Dani Hernández, Arroyo, Nacho Porcar, Manel Royo, Cristian, Iván Casado, Mario Robles, Anuar, Juliá, Renzo Zambrano, Adrián, José, Toni, Caye Quintana y Dani Vega.
Por su parte, Javier Bermúdez también presentará varias bajas; a saber: Pablo, Seoane y el exblanquivioleta Fran Adeva, por lesión, y Pajarero, por sanción. Con ellos o sin ellos, como se dará el envite, otra vez el filial ha de hacer de la necesidad virtud y de convertir en realidad su afán de sumar tres nuevos puntos.
Cabe recordar que en el choque de la primera vuelta el Promesas cuajó un pésima primera mitad y estuvo cerca de puntuar tras una buena segunda. Después de tirar aquel encuentro, el Real Valladolid B ha de resarcirse no solo por lo sucedido entonces, sino porque no caben dudas ni licencias para el descanso o la desconexión a estas alturas. Una victoria acercaría a la salvación, objetivo todavía algo alejado.