Álvaro Rubio atendió a los medios de comunicación después de la derrota del Real Valladolid ante el Celta, por la mínima y por un penalti que señaló el árbitro a instancias del VAR. «Hemos tenido tres ocasiones bastante claras, pero una jugada un poco polémica cayó en nuestra contra», condensó el entrenador, que vio a su equipo ir de menos a mlas hasta «plantar cara a un rival que pasa por un buen momento».
El riojano definió su sensación como de «tristeza», porque ve que sus jugadores «quieren y lo intentan, pero hay veces que no hay manera y eso se convierte en una frustración: el querer y no poder». «Se han ceñido muy bien al plan de partido y hemos contrarrestado a un equipo muy poderoso ofensivamente, y que es muy protagonista con balón», valoró Álvaro Rubio, que destacó cómo ese trabajo les llevó a tener oportunidades de gol.
Así, aunque «en los primeros minutos» el Real Valladolid estuvo «por detrás del balón», algo que no entraba en sus planes, cuando ajustaron «el equipo mejoró y se encontró más cómodo». Esto fue así, en parte gracias a los cambios, que salieron «muy bien». Hemos podido genear ocasiones muy claras, aunque un desajuste defensivo nos ha llevado a la acción del gol», dijo antes de hablar de la jugada en sí.
La explicación del penalti
Álvaro Rubio nunca es altisonante a la hora de valorar las decisiones arbitrajes, aunque no le quedó otra que referirse a la señalización de la pena máxima de Javi Sánchez. «Siempre me han explicado que esa acción no es penalti y no entiendo cuál ha sido el cambio», afirmó el entrenador, que comentó que ha visto «muchas veces» acciones como esa, en la que hay un rebote previo a la mano «y no las han pitado».
«No sé si me lo han explicado mal o lo he entendido de otra manera. Supongo que para el árbitro está muy claro. Ya no hay marcha atrás», lamentó el técnico logroñés, que prefirió quedarse, otra vez, con el «trabajo enorme que ha hecho el equipo». «Es una pena que vayamos a estar dos semanas sin competir, porque creo que la derrota ha sido muy injusta y muy cruel con nosotros, pero tenemos que levantarnos. Vamos a ir hasta el final, hasta que nos dé la máquina, y con la cabeza bien alta después de hacer partidos como este», finalizó.