Contracrónica del Real Valladolid 1-2 Atlético de Madrid
El Real Valladolid perdió 1-2 ante el Atlético de Madrid y ya es equipo de Segunda División. En el encuentro ante los colchoneros, el equipo estuvo a la altura, pero los malos cambios y los errores volvieron a condenarle. Con esta derrota el Pucela pone fin a una estancia de tres años en la máxima categoría del fútbol español. Duele mucho, y más por lo que prometía esta campaña, pero las cosas no salieron desde el inicio. Malas rachas mezcladas con empatitos que no servían de mucho. Se ha visto a un Valladolid sin ideas, sin fútbol, sin alguien capaz de darle una vuelta a la situación y lo más importante, sin actitud en los momentos clave. Por todo ello, el conjunto blanquivioleta baja merecidamente a la categoría de plata.
Descenso consumado. Desde las 18:00 horas hasta el descanso el Pucela estuvo a un gol del Valencia de obrar el milagro, pero en la segunda parte todo cambió. El Atleti remontó al Valladolid y ganó la Liga, el Elche se salvó y el Huesca cayó a Segunda División, acompañando a los de Sergio y a los de Mendilibar. Así, el conjunto blanquivioleta certificó un descenso que se veía venir desde hace bastantes jornadas. La temporada del Real Valladolid es de suspenso, sin acercarse ni al tres, y aun así, ha tenido opciones remotas de salvarse hasta la última jornada. El año que más difícil era bajar el equipo castellano ha conseguido un descenso más que merecido.
Toda una Liga sin dejar la portería a cero en casa. Este es un dato revelador de lo que ha sido la temporada para el Real Valladolid. Lo que tenía los años anteriores, solidez defensiva, lo ha perdido esta campaña. Si te marcan en todas las jornadas en casa y en todas menos dos fuera, es muy difícil que saques buenos resultados. Esta estadística se debe al mal hacer de todos los centrales del equipo, a excepción de Olivas y El Yamiq en ocasiones. La presencia de Nacho en el campo perjudicó mucho al equipo, y la llegada de Olaza lo mejoró bastante, pero no fue suficiente.
Había equipo para más. Con las flaquezas defensivas mostradas anteriormente, la sensación es que, a pesar de esto, había equipo para más. De mediocampo hacia delante todas las líneas eran mejores que años anteriores. El lateral derecho con Janko y Pablo Hervías también, y el izquierdo con la llegada de Lucas Olaza aún más. Bien, pues con todos estos recursos el Valladolid no ha sido capaz de ganar más que cinco partidos en toda la temporada ni de sacar más de una victoria en las últimas veinte jornadas. Resulta decepcionante para el aficionado blanquivioleta que con lo que se tenía se haya tirado por la borda una temporada en la que se podía hacer mucho más.