El concejal de Deportes en el Ayuntamiento de Valladolid considera que el deporte ha sufrido las restricciones de forma injusta, siendo «una herramienta fundamental para generar salud»
El once de abril se reanudará el fútbol base de la provincia tras más de un año sin que la pelota eche a rodar. Aunque el fútbol regional sí que se ha reanudado, esta temporada, el provincial estaba en las manos de una Junta de Castilla y León que ya ha dado luz verde para que los clubes puedan disfrutar de un deporte que mueve 10.000 niños y niñas de diversas edades. Una de las voces autorizadas en el Ayuntamiento de Valladolid, el concejal de Deportes, Alberto Bustos pasó por el programa #HacemosCantera en Radio Marca, donde analizó este paso tan importante que ha dado la Junta: «Lo veníamos reclamando desde hace meses, entendiendo que el deporte es una herramienta fundamental para generar salud. El hecho de tener a miles de niños y niñas en una actividad sedentaria durante un año puede generar problemas en su desarrollo. La decisión se ha tomado un poco tarde, pero se ha tomado, que es lo importante».
Además de cumplir los protocolos establecidos, los niños tendrán que practicar el deporte con la mascarilla, algo que a Bustos le genera alguna que otra duda. «No es lo ideal, ni para hacer deporte, ni para dar un paseo, ni para nada. Yo entiendo que sea una precaución lógica y mejor eso que nada. Yo creo que habrá modalidades donde la mascarilla estorbará más y en otras menos. Nos acabaremos acostumbrando. La reanudación del deporte será un golpe de autoestima, estoy seguro», valora.
El concejal considera que las familias «están muy comprometidas» por y para la causa y, por ello, y por todo lo que genera el deporte a la ciudad de Valladolid, han decidido mantener las subvenciones, ya que los clubes han sufrido económicamente todas y cada una de las restricciones. «Nosotros hemos mantenido las ayudas a los deportes, a pesar, de la decisión que se tomó de no haber competición», arguye el edil, que considera que «más allá de competir o entrenar, las funciones que hacen los clubes son esenciales» y explica que «todas estas ayudas» han sido enfocadas «a obras y a mejoras», entre otras cuestiones, «y eso los clubes lo agradecen».
Con todo, Bustos sabe la importancia que tienen los clubes en los barrios y cree que el deporte va a ayudar, no solo a la propia «integración», sino al bienestar de las personas. «El deporte, más que un problema, es una necesidad para la salud. Sin embargo, se ha dejado para el final de la desescalada. Paradójicamente, recoge el Boletín Oficial que el deporte, y se ha demostrado, no es una fuente de contagios», manifiesta.
No en vano, «como se ha demostrado», deberían haber tomado «la decisión antes». «No entiendo porque en un teatro pueden ir 400 personas y en Pisuerga, que caben 7.000, nadie. El deporte ha sufrido, creo que de manera injusta, algunas restricciones. En todo caso, bienvenidos sean los cambios», concluye.
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