El Real Valladolid recibe a un Barcelona irregular y buscará, sin confiarse, pero con esperanzas, conseguir tres puntos de ensueño
El FC Barcelona visita Zorrilla este martes y el Real Valladolid, que quiere dar un zarpazo ante un grande, intentará aprovechar las horas bajas en las que llegan los azulgranas y ser una nueva ‘pesadilla’ para ellos. El equipo de Koeman ni cumple ni convence. Lleva una dinámica irregular, tanto en juego como en resultados, con siete puntos de los quince últimos posibles, tres derrotas lejos del Camp Nou, y con sensaciones muy dudosas.
El momento agridulce del rival y las buenas sensaciones con las que se presenta el Pucela son la combinación ideal para que los blanquivioletas puedan dar la sorpresa de la jornada. El punto tan trabajado y merecido que obtuvieron el pasado sábado ante el Sevilla (1-1), en el Sánchez-Pizjuán, es un refuerzo de cara al partido y que puedan sumar frente al Barça. Un golazo de Carnero a pocos minutos del final puso la guinda a una gran segunda parte y a un enorme esfuerzo en Nervión. Además, el propio mister, Sergio González, afirmó en rueda de prensa que ojalá puedan mantener ese buen ritmo el martes porque «sería la mejor medicina para hacer frente a otro equipo tan fuerte».
Asimismo, los números de los blanquivioletas son síntoma de crecimiento exponencial, ya que suman once puntos de los últimos dieciocho posibles, con tres victorias, dos empates y tan solo una derrota (2-0 ante el actual líder, el Atlético de Madrid) en las últimas seis jornadas y un nivel de competición óptimo, así como una línea ascendente en general en la Liga, puesto que comenzaron con una mala racha en los primeros ocho encuentros, pero han sabido reponerse y poder mirar hacia arriba con más firmeza.
Los choques entre semana siempre suelen ser sinónimo de variaciones en el equipo, y más después de un derroche tan importante como el realizado en Sevilla. Sergio González compareció en la mañana del lunes en sala de prensa y reconoció que introducirá cambios ante el Barcelona, aunque no anunció la lista de los convocados, pero sí aseguró que Janko no podrá jugar aún y que Sergi Guardiola tampoco lo hará porque tuvo una molestia en el último partido. Por su parte, Javi Sánchez, Rubén Alcaraz y Joaquín vuelven a estar aptos y habrá algunas novedades en el once como las entradas de Toni Villa o Jota que permitirán descansar a jugadores habituales como Orellana u Oscar Plano.
Pese a que el Barcelona no llegue en su mejor momento, lo que es cierto es que es un rival muy fuerte y de mucha exigencia. Los blanquivioletas tendrán que estar con la máxima atención en todo momento durante el choque e intentar dar su mejor versión para poder darle un susto al conjunto de la ciudad condal. El Real Valladolid sabe adaptarse a los grandes equipos y siempre ha competido bien ante ellos y, a pesar del momento atípico que vive el Barça, Sergio González no se fía.
El entrenador ha manifestado que «nunca es un buen momento» para enfrentarse a un equipo de tal calibre, aunque su trayectoria no sea la idónea, tiene futbolistas «con un talento y condiciones descomunales», es uno de los grandes, y en cualquier momento puede revertir la situación. González también se ha mostrado esperanzado en que les harán sentirse «incómodos sobre el campo» y que, así, podrán «tener opciones, seguro».
Por su parte, el Barcelona atraviesa un momento difícil en todos sus ambitos, tanto en lo deportivo como en lo extradeportivo. A unas elecciones a la presidencia del club muy cerca y a los diversos escándalos económicos surgidos en los últimos meses hay que añadirle que la dinámica deportiva es muy irregular.
Los culés no consiguen encontrar su mejor versión sobre el campo y eso se ve reflejado en resultados: llevan siete puntos de los últimos quince posibles, con dos victorias, dos derrotas y un solo empate (el último frente al Valencia en el Camp Nou). Este punto cosechado ante el equipo valencianista le deja quinto en la clasificación con veintiún puntos, a ocho del liderato, y es una clara muestra de que el conjunto azulgrana no termina ni de cumplir ni de convencer.
La trayectoria del Barça como visitante está dejando mucho que desear este año, con tres derrotas lejos de su feudo (ante el Getafe, Atlético de Madrid y Cádiz), en contraste con los años anteriores, sobre todo cuando visita el José Zorrilla. En sus dos últimos encuentros en Valladolid logró dos victorias por la mínima (0-1), en dos partidos muy disputados y en los que Dembelé y Arturo Vidal, respectivamente, salvaron a su equipo de dejarse dos puntos ante un Real Valladolid atrevido.
Este martes se celebrará un duelo de opuestos; por un lado, a un Barça buscando reencontrase a sí mismo y, por otro, a un Real Valladolid que intentará seguir brillando, romper la racha negativa como local ante el equipo catalán, y dar a la afición blanquivioleta el mejor regalo navideño: una victoria ante el Barcelona. Los de Sergio González pueden soñar a lo grande, tienen mucho que ganar y poco que perder.
