El delantero del Real Valladolid lamentó la derrota ante el Eibar en Ipurua ya que fue un partido competido por ambos conjuntos
El Real Valladolid no pudo conseguir ningún punto en la penúltima jornada de liga ante la SD Eibar. Pese a que los blanquivioletas llegaban a ella con el objetivo de la salvación matemáticamente cumplido, se fueron de Ipurua con un mal sabor de boca y «jodidos», tal y cómo manifestó el delantero Sergi Guardiola.
Tanto los de Sergio González como los locales ya tenían en el bolsillo sus objetivos antes de que echase a rodar el balón, pero esto no fue excusa para que no se viviese un partido disputado y con diferenciadas fases para cada equipo como el que se vio. «Cada uno hemos tenido nuestros momentos, ellos han estado más acertados y, por eso, se han llevado la victoria» afirmó. Además, calificó los goles en contra como «castigos» , debido a que estos llegaron «cuando mejor estaba el equipo».
Asimismo, hizo hincapié en lo importante que es para los blanquivioletas seguir sumando puntos, pese a que ya no sean estrictamente necesarios. También lo es acabar la temporada con buenas sensaciones y sobrepasar la barrera de las cuarenta unidades. «Ya estamos pensando en el partido del domingo en Zorrilla. Vamos a salir a ganar y a ver si podemos llevarnos los tres puntos», finalizó.