El técnico del Real Valladolid Promesas valoró el encuentro ante el FC Barcelona B que tendrá ocasión este domingo como una «oportunidad y premio al trabajo de toda la temporada»
La cuenta atrás se acaba, la alarma suena. El Real Valladolid Promesas se desplazará el miércoles a Málaga para afrontar el importante play-off de ascenso a Segunda División que tendrá lugar este domingo a las 20:00 horas «con ilusión y opciones de pasar de ronda». Así lo comentó Javier Baraja este martes en la rueda de prensa telemática. Para el técnico blanquivioleta, esta promoción supone un premio al trabajo que han realizado a lo largo de la temporada. «Tenemos la ilusión de competir como hemos venido compitiendo durante todo el año», expresó.
El FC Barcelona B, uno de los rivales más exigentes y que cuenta en sus filas con jugadores que han gozado de protagonismo en el primer equipo, es el rival que se verá las caras con los blanquivioletas el domingo. «Es un rival difícil, con buenos números, buena dinámica y sobre todo con una buena pegada con el balón. Va a ser un partido bonito y entretenido para el espectador, los dos conjuntos tenemos en la plantilla a jugadores jóvenes con la ilusión de llegar a Primera División», comentó el técnico.
Debido a la crisis provocada por el coronavirus, este año el formato de play-off es diferente y los equipos no podrán disputar los encuentros en su estadio ni contar con la presencia de sus aficionados. «Podemos pensar que nos viene peor por la fortaleza que hemos demostrado en Los Anexos. Pienso que nos va a venir bien, somos un equipo muy peligroso, manejamos bien los tiempos, los jugadores tienen energía y eso hace que los partidos se hagan más largos», comentó Baraja.
El técnico apuntó que se trata de una «eliminatoria de paciencia, con dos equipos a los que les gusta tener el balón». Por ello, reconoce que en esa paciencia el Promesas ha encontrado el éxito. «También sabemos sufrir sin balón, se trata de un partido para madurar y el que haga una mejor lectura se llevará el partido», agregó.
Pendientes del primer equipo
El canterano Kike Pérez, que realizó buenas actuaciones en los duelos que disputó con el primer equipo, no podrá entrar en los planes de Baraja al sufrir un esguince de grado I del ligamento colateral interno de la rodilla izquierda, que supondrá una baja importante a la que el técnico del filial tendrá que plantar cara. «El nivel que ha mostrado con el primer equipo es el que ha mostrado durante todo el año. La baja de un jugador con su capacidad nos hace daño, aunque tenemos otros jugadores han trabajado duro durante estos días y en los que se puede confiar», destacó.
Junto a ello, varios jugadores del Promesas seguirán ejercitándose con el primer equipo y, debido a las exigencias físicas provocadas por el apretado calendario, se espera que alguno de ellos se desplace a Ipurúa. «Para ellos es un premio poder seguir en la disciplina y disputar partidos con el primer equipo. Es la recompensa al trabajo que han hecho. Para mí, es todo un orgullo que hayan llegado a ese nivel», indicó.
Por último, ante las bajas de los canteranos que están en dinámica con el primer equipo, Baraja cuenta con varios juveniles que han estado ejercitándose con el filial a lo largo de estos dos meses y alguno de ellos podría viajar a Andalucía. «Estoy tranquilo, cuando hemos necesitado a un juvenil lo han hecho bien. Tengo confianza en ellos, tienen nivel y se están acercando al ritmo de competición que exige Segunda B», concluyó.
