El lateral zurdo, que tuvo un buen paso por las filas del Real Valladolid, ha consolidado su brillante carrera en el Athletic Club durante estos últimos años
Tras haber militado durante dos temporadas en el Real Valladolid, Mike Balenziaga ha afianzado su trayectoria futbolística en los últimos siete años en el Athletic Club, donde ha sido una pieza clave. El vasco tiene a sus espaldas más de trescientos partidos como profesional; sin embargo, después de ser titular indiscutible durante más de cuatro temporadas, ha dejado paso a compañeros más jóvenes.
Este curso, antes del parón, había disputado tan solo cinco encuentros –tres en liga y dos en Copa del Rey–, sin un gran brillo. Pero esta escasa participación no es sorpresa, ya que la pasada campaña ocurrió algo similar: jugó trece partidos, once en la competición regular y dos en Copa. Pese a todo ello, el lateral sigue siendo uno de los hombres importantes dentro del vestuario vasco debido a su amplia experiencia y veteranía.
A lo largo de toda su vida deportiva Balenziaga ha estado ligado al Athletic Club, pero sus comienzos fueron dispares. Se formó en la cantera de la Real Sociedad y disputó hasta dos temporadas en Segunda División B con el filial txuri-urdin, pero un año después cambió el rumbo de su camino marchándose a Bilbao para vestir la camiseta de los leones. En esta primera etapa logró debutar en Primera División, pero aún era muy joven, y por ello fue cedido durante un año al CD Numancia, que militaba, como ahora, en Segunda División. Además, en ese mismo periodo fue convocado con la selección española sub-19 en 2007 y sub-21 en 2008.
El lateral bilbaíno aterrizó en Valladolid el verano de 2011 y permaneció hasta el de 2013, con ascenso incluido. En su primer curso como blanquivioleta jugó 41 partidos, entre ellos los cuatro correspondientes al play-off. Realizó una excelente tarea en la línea defensiva y tuvo gran peso en los éxitos de aquel equipo que retornó a la máxima categoría. En el segundo y último año continuó en su buena línea de trabajo: participó en 34 choques y poco a poco fue creciendo y madurando profesionalmente.
Tras estas dos magníficas campañas fue el Athletic Club quien movió ficha y decidió repescar a Mikel Balenziaga con la opción de recompra que se lo permitía y, desde entonces hasta la actualidad, San Mamés es su casa. Siete años consecutivos lleva disfrutando la afición bilbaína de su buen fútbol y de una banda izquierda que, con él defendiendo, es infranqueable. En este equipo ha consolidado su impecable trayectoria y ha sido una pieza fundamental en la columna vertebral del mismo. Siempre ha demostrado un buen nivel, pero fue en los cuatro primeros cursos tras su regreso cuando más despuntó.
Asimismo, vistiendo la camiseta de los leones ha conseguido marcar su único gol oficial, en la 2016/17, y ha llegado a jugar en competiciones europeas, tanto en la Champions como en la Europa League. Con mucho trabajo constante y un gran recorrido, Balenziaga se ha convertido en un lateral de garantías y uno de los destacados de nuestra liga. En definitiva, se trata de un defensor que a muchos les hubiese gustado tener en su equipo y que pocos han podido disfrutar; entre ellos, el Real Valladolid.
