Los rojinegros vencieron por cero a uno en un encuentro marcado por su intensidad defensiva y un fallo de los blanquivioletas
El Real Valladolid de División de Honor cayó derrotado por cero a uno ante el Unión Adarve. Los vallisoletanos dominaron el juego y la posesión, pero un fallo defensivo los condenó en exceso. Tras pagarlo con un gol, los de Ricardo López intentaron devolver el golpe con una pena máxima, pero el larguero desbarató los planes y el marcador no se movió más.
El encuentro arrancó con un Pucela volcado al ataque. Los blanquivioletas comenzaron avisando dos veces: primero, por medio de Casado, que disparó cuando solo se habían disputado un par de minutos, y luego, con Carrión y Alvi como protagonistas. El extremo se fue por banda llevándose a tres zagueros, la puso al área y el ’11’ remató de tijera. Sin embargo, el acrobático chut se fue alto.
Pocos minutos después, Maroto fue el encargado de hacer que la grada gritara ‘uyyy’. El ‘8’ remató muy forzado un balón que detuvo sin complicaciones Iván, guardameta de los madrileños. Pasado el ecuador del partido, los lobos tuvieron la oportunidad de adelantarse con una falta desde la zona de tres cuartos que se encargó de botar Gallego. El ’10’ le pegó rasa y Maxi detuvo sin apuros.
Parecía que el Unión Adarve quería cambiarle la cara al partido y pasó de estar encerrado atrás a presionar la salida de balón. Sin embargo, todo fue un espejismo, y este cambio de juego duró unos minutos hasta que los pucelanos aprovecharon los espacios y los del Barrio del Pilar volvieron ponerse el mono de trabajo.
Esta permuta se debió, en gran medida, a la labor ofensiva en las bandas. Una de las jugadas más destacadas llevó la firma de Maroto, que aprovechó un hueco en la banda para poner el balón desde el lateral, pero no llegó a encontrar rematador y la pelota se paseó por el área.
La segunda mitad siguió un guión muy parecido al del primer acto, ya que el juego continuó bastante trabado. El primer y único golpe llegó a la hora de encuentro. Un fallo de entendimiento entre Amoah y Héctor condenó a los blanquivioletas. Marcos Talavera fue el más listo de la clase y robó la pelota, cabalgó con el esférico y se plantó ante Maxi. El guardameta vallisoletano se hizo grande, pero no consiguió detener el disparo.
A partir de este momento, se vio menos juego en Los Anexos. El Real Valladolid intentaba proponer mientras luchaba contra tres factores clave: las pérdidas de tiempo, las duras entradas y el entramado defensivo de los rivales. Superada la mitad de la segunda parte, el Pucela tuvo en su mano el empate.
Iván derribó a Torres en el área y el colegiado decretó la pena máxima. Los dos protagonistas se volvieron a encontrar en el punto de penalti, pero el ‘9’ mandó al larguero el balón y no consiguió anotar en el rechazo.
Cuando todo parecía acabado, Camilo y Palomeque combinaron fuerzas. El ’14’ la puso al área y encontró al ’12’, que remató de cabeza, pero salió alto. Poco después, el árbitro pitó el final y los tres puntos se fueron para Madrid.
Real Valladolid: Maxi; Iker, Amoah (Camilo, min. 79), Héctor Blanco, Casado; Prada, Javi Díez (Diego Iglesias, min. 64), Maroto, Alvi (Castri, min. 64), Carrión (Palomeque, min. 85); y Torres.
Unión Adarve: Iván; Miguel (Marcos V., min. 85), Íñigo, Reda, Diego, Ayuso; Joaquín (Gonzalo, min. 79), Escriba, Gallego, Pepe (Fer Alonso, min. 64); y Marcos Talavera (Jorge, min. 90+2).
Goles: 0-1, min. 60: Marcos Talavera.
Árbitro: Simonov Todorov, del colegio castellano y leonés, asistido en bandas por Martín Fernández y García Caballero. Amonestó a Carlos Sánchez, segundo entrenador de los locales y a los visitantes Diego, Miguel, Ayuso, Gallego, Iván y Gonzalo.
Incidencias: Partido correspondiente a la jornada doce en el grupo V de División de Honor, disputado en Los Anexos ante unos ciento cincuenta espectadores.