Desde que el técnico catalán aterrizó en tierras vallisoletanas, el Pucela ha obtenido buenos resultados en 21 de los 33 partidos lejos de su feudo
Foto: Real Valladolid
El 10 de abril de 2018, el Real Valladolid hacía oficial la llegada de Sergio González. Esta fecha quedará marcada no solo en la historia blanquivioleta, si no en la memoria de todos los aficionados vallisoletanos. Por aquel entonces, el equipo se encontraba en Segunda División y se caracterizaba por sus pésimos resultados fuera de casa, imagen que cambiaría con la llegada del técnico catalán, que ha obtenido buenos resultados en 21 de los 33 encuentros a domicilio.
La buena actuación del equipo en El Molinón (1-2) y posteriormente en Los Pajaritos (3-0) en los play-off supuso el ascenso del Pucela a la máxima categoría del fútbol español, rompiendo de esta manera el maleficio de derrotas lejos del José Zorrilla.
En su regreso a la élite, a los blanquivioletas no les pesó el cartel de recién ascendidos, y siguieron con la buena dinámica a domicilio. Así, compitieron a un buen nivel en campos importantes como el Metropolitano y el Santiago Bernabéu y rascaron puntos en otros de igual nivel, como San Mamés, Balaídos o Mestalla. Los pucelanos puntuaron en 11 de los 19 choques disputados fuera de casa, lo que permitió añadir 21 unidades al casillero, la mitad del botín final de 41.
Esta campaña 2019/20, debido a las reformas en el Estadio José Zorrilla, el conjunto dirigido por Sergio González disputó las tres primeras jornadas a domicilio. A primera vista había dudas, pero el Pucela no solo dio la cara, si no que se llevó un buen botín de puntos.
Lo cierto es que, de los seis encuentros disputados lejos de Zorrilla, el Real Valladolid ha logrado puntuar en cuatro de ellos, fruto de dos victorias y dos empates. Las estadísticas hablan por sí solas y el cuadro blanquivioleta es, junto al Real Madrid y Granada, el equipo que más puntos a obtenido lejos de su feudo (8), solo superado por el Sevilla de Lopetegui (9 puntos).
El Real Valladolid ha asaltado esta campaña el Benito Villamarín y RCDE Stadium. El Real Betis fue la primera víctima de los castellanos y, pese a que Loren neutralizó el tanto inicial de Guardiola, Óscar Plano en el último suspiro del encuentro fue el encargado de llevar los tres primeros puntos a tierras vallisoletanas. Por su parte, la victoria ante el Espanyol supuso una bocanada de aire para los pucelanos, ya que dos derrotas y dos empates les habían situado en la parte baja de la clasificación.
Asimismo, los blanquivioletas también rascaron un valioso punto en el Santiago Bernabéu y San Mamés. En ambas ocasiones, los de Sergio se vieron por debajo en el marcador aunque, gracias a su confianza e insistencia, igualaron el marcador y salieron por la puerta grande.
En el feudo del Athletic Club, el Pucela volvió a puntuar en un partido en el que los locales se adelantaron con un autentico golazo de Williams. Sin embargo, Iñigo Martinez, en propia puerta, puso el 1-1 definitivo. No es la primera vez que el conjunto blanquivioleta silencia feudos ajenos, ya que, ante el Real Madrid volvió a repetir su épica. Cuando apenas restaban dos minutos para que se cumpliese el tiempo reglamentario, Sergi Guardiola dejó claro que no es tan fácil superar al Real Valladolid al rescatar un punto.
Hoy por hoy, el Real Valladolid es considerado un rival tenebroso y astuto a domicilio. No en balde, desde que Sergio González se hizo con las riendas, el equipo ha obtenido buenos resultados en 21 de los 33 encuentros disputados lejos del José Zorrilla, de los cuales 15 han sido en Primera. Así, si la dinámica positiva se mantiene, parte de la permanencia podría forjarse lejos del José Zorrilla, al igual que ocurrió el año pasado.