El técnico del CD Parquesol de Cadete Regional destacó la importancia de «fijar un objetivo» en una categoría en la que, esta temporada, los naranjas quieren quedar lo más «arriba» posible
En más de una ocasión, cuando las fuerzas flaquean, la cabeza es la que se hace con el timón para llegar a buen puerto. De eso sabe mucho Alberto Serrano, técnico del CD Parquesol de Cadete Regional, que pasó por los micrófonos de #HacemosCantera en Radio Marca para explicar la importancia de lo psicológico en esta categoría.
«Es muy importante, porque con quince años no saben si ir a un sitio o a otro. Si alguien les fija un objetivo les puede venir muy bien; los chavales se derrumban si no tienen alguien que los anime», apuntó.
Serrano, que tras colgar las botas fue segundo entrenador en el Palencia Balompié, «siempre» había entrenado a «chicos más mayores». Asegura que está viviendo «una experiencia nueva», ya que cada futbolista tiene que «pasar de ser un jugador joven a alguien más experto». Por ello, los trata «como jugadores profesionales«. «Son chavales que tienen una edad muy complicada y, al final, intentas tratarlos como adultos».
Gracias a esa filosofía, los naranjas son segundos y, aunque venían de hacer «una pretemporada buena», el técnico reconoce que no pensaban «ganar cuatro partidos y empatar uno». El último triunfo fue en el derbi ante el Victoria, al que vencieron por tres goles a uno. «Tuvimos el partido dominado porque nos pusimos por delante y luego anotamos el segundo. Nos dieron algún susto, pero a la contra metimos el tercero», recordó.
Alberto Serrano ve a su equipo «compacto, con pólvora arriba», y mira también hacia los infantiles, campeones la pasada campaña, en caso de que sea necesario complementar la plantilla, como ya hizo en verano. «El equipo se está acoplando. En pretemporada hemos usado jugadores del Infantil A: saben cómo jugamos hay buenos chavales para poder tirar de ahí. Es muy importante tenerlos en el B porque en este equipo estamos rotando bastante».
Aupado en lo más alto, el CD Parquesol no quiere bajar de ahí, por lo que la exigencia debe mantenerse al mismo nivel. «Lo más bonito del fútbol es estar arriba pero, si no competimos al máximo, no estaremos ahí. El día que nos relajemos vamos a perder. Hay unos cuantos filiales y, cuando más arriba quedemos, mejor. Ahora nos vienen esos equipos y nos van a poner en su sitio, veremos si podemos aguantar el tirón», finalizó.
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