El gol de Seguín a los dos minutos sirvió para doblegar al filial, que tardó en sentirse cómodo sobre el césped y que no consiguió imponer su juego
Tarde aciaga para el Real Valladolid Promesas, que cayó derrotado por la mínima ante la SD Amorebieta. Los pupilos de Javi Baraja tardaron en asentarse, y solo en la segunda parte gozaron de las ocasiones más claras ante un rival que le ganó la partida en el dominio del juego.
Al filial le tocó remar contracorriente desde muy temprano. Cuando apenas se habían disputado dos minutos, Seguín aprovechó un error de la zaga para hacerse con la pelota y, con un potente y lejano disparo, sorprendió a Gaizka, que solo pudo recoger el esférico del fondo de la red.
El gol fue un mazazo para los blanquivioletas, que tardaron en recomponerse. Mientras, el conjunto vizcaíno fue el que se hizo con el control de la pelota, aunque sin desplegar un juego demasiado vistoso y desbaratando cualquier peligro con los cinco hombres de atrás.
Con el paso de los minutos, el Promesas se fue recomponiendo, aunque sin lograr imponerse en el centro del campo, donde El Hacen partió como titular en detrimento de Oriol Rey. Solo Víctor, con algún envío lateral, intentaba poner a prueba los reflejos de Saizar.
Sin embargo, el que estuvo más cerca de volver a ver puerta fue el cuadro zornotzarra. Aldalur, muy activo durante todo el choque, le ganó la espalda a su par y apuró la línea de fondo antes de poner el centro desde la derecha. Orozko, en el corazón del área pequeña, conectó un disparo que se fue rozando el travesaño.
El paso por vestuarios le sentó bien al filial, que avanzó un pasito al frente. El primer aviso lo dio Víctor al ejecutar un libre directo que obligó a Saizar a emplearse a fondo por primera vez para despejar a córner.
Fue entonces cuando Baraja decidió mover el banquillo, dando entrada a Stiven Plaza por Doncel. Asimismo, Corral y Raúl Navarro permutaron sus bandas, buscando así tener más incidencia en el juego exterior. Nada más entrar, el ecuatoriano hizo que la grada contuviera la respiración al estrellar un balón en la madera.
Con todo, volvió a ser el Amorebieta el que vio puerta con un cabezazo de Arregui ante Gaizka, pero el linier levantó el banderín por posición antirreglamentaria y el colegiado anuló el que hubiera sido el 2-0.
La entrada de Plaza terminó de espolear al Promesas, que nuevamente tuvo una de las mejores ocasiones del encuentro. El atacante cabeceó un envío de Víctor desde la derecha que, sin embargo, se fue desviado.
Cuando parecía que el empate podía estar cerca, el Amorebieta volvió a despertar de la ilusión al filial. Orozko intentó cazar un centro en el costado izquierdo del área pequeña, donde fue arrollado por Jaime, lo que provocó que el árbitro pitara penalti.
Mikel Álvaro tuvo en sus botas la sentencia, pero a su mal disparo al ejecutar la pena máxima ‘a lo Panenka’ se unieron los reflejos de Gaizka, que adivinó sus intenciones y detuvo el lanzamiento.
Fue lo último que se jugó, pues los diez minutos se diluyeron entre sustituciones y parones en los que el más beneficiado fue el cuadro azul. Así, el Promesas cayó derrotado en una tarde gris, en la que tardó en sentirse cómodo y en la que no pudo hacerse con el control del juego en ningún momento.
Sociedad Deportiva Amorebieta: Saizar; Aldalur, Arregi, Sagastibeltza, Antxón, Seguín; Remen (Ortega, min. 77), Ekaitz, Ekain (Amorrortu, min. 63), Mikel Álvaro; y Orozko (Gabri, min. 90+1).
Real Valladolid Promesas: Gaizka; Raúl Navarro, Jaime, Alende, Corral; Víctor, El Hacen (Óscar, min. 84), Kike Pérez, Doncel (Stiven Plaza, min. 64); Zalazar (Soberón, min. 73) y Miguel.
Goles: 1-0, min. 2: Seguín.
Árbitro: Godia Sole, del colegio catalán, asistido en las bandas por Lucas Gómez y León Robles. Amonestó a los locales Arregui, Orozko, Seguín, Ekaitz y Saizar y a los visitantes El Hacen, Jaime, Alende y Soberón.
Incidencias: Partido correspondiente a la jornada seis en el grupo II de Segunda División B, disputado en Urritxe.
