Los de Javi Baraja, que dominaron el choque de principio a fin, comienzan la temporada con un estilo de juego remozado y dejando buenas sensaciones
Foto: Real Valladolid
El Real Valladolid Promesas firmó un espectacular debut ante el CD Izarra, al que dominó durante todo el choque. Los blanquivioletas golearon en el debut de Javier Baraja en el banquillo y mostraron una imagen seria, de un equipo maduro que aspira a hacer grandes cosas.
Con los ecos del pitido inicial aún resonando, y algún que otro rezagado buscando acomodo, Marcos André aprovechó la mala salida del cuadro navarro para filtrar un balón medido que Víctor, después de conseguir regatear al guardameta visitante Álex, mandó al fondo de la red.
El plan de Baraja funcionaba a la perfección. El filial presionaba la salida del balón del Izarra, muy incómodo sobre el césped, y se volcaba una y otra vez sobre el área rival.
Con todo, Toni cortó por un momento la respiración de los blanquivioletas con un disparo desde la frontal que obligó a Samu a meter la manopla para desviar a córner. Fue la ocasión más clara para los de Unai Jáuregui, que estuvieron a merced del Promesas durante todo el encuentro.
Kike Pérez aumentó la renta antes de sobrepasar el ecuador de la primera parte con un soberbio cabezazo, tras aprovechar el envío desde la derecha de Miguel tras un buen pase de Víctor.
El cambio al campo de césped natural no alteró a los de Baraja, que desplegaron un espectacular juego por las bandas y, combinándolo con una fuerte presión alta, anularon al conjunto estellés. Solo con faltas lograban recuperar el balón que, no obstante, tampoco les duraba demasiado.
El Promesas no bajó la intensidad, y antes del descanso llegó el tercer gol en una bonita jugada que nació de las botas de Samu. El guardameta sacó en largo y la pelota le cayó a Miguel, que prolongó para Marcos André. El brasileño se la cedió a Doncel que, a placer, batió a Álex.
El monólogo de la primera parte continuó tras el descanso. El filial siguió dominando con holgura, dejando detalles de calidad y alternando jugadas rápidas con largas posesiones en las que llegó a encadenar más de veinte toques. En una nueva oportunidad, Marcos André, en una delicatessen, puso un centro al área, pero la zaga del Izarra lo repelió.
También pudo aumentar distancias Doncel, que no llegó, por muy poco, a enganchar el envío de Miguel desde el costado izquierdo. Kike Pérez, en la más clara del segundo acto, aprovechó un pase de Zalazar para plantarse solo ante Álex, pero su disparo acabó estrellándose en el cuerpo del portero.
En uno de los pocos errores del Promesas, Toni García le robó la cartera a Kike Pérez y, desde el centro del campo, aprovechó que Samu estaba adelantado para anotar un auténtico golazo.
Ya en el añadido, Stiven Plaza se estrenó como goleador al cazar un balón largo. A la contra, cabalgó y se plantó ante el guardameta, se escoró a la derecha y, con un disparo cruzado, redondeó el resultado. Tanto, póker y partido.
Con un estilo de juego remozado, más incisivo y con mayor protagonismo para los extremos, el Real Valladolid Promesas arrancó el curso con una contundente goleada y con la sensación de que, esta temporada, pasará menos apuros y aspirará a cotas altas.
Real Valladolid Promesas: Samu; Raúl Navarro, Jaime, Alende, Corral; Víctor García (Soberón, min. 81), Kike Pérez, Oriol Rey, Doncel; Miguel (Stiven Plaza, min. 77) y Marcos André (Zalazar, min. 69).
CD Izarra: Álex Ruiz; Eneko, Cabrera, Gian Allala, Albisu; Ruper, Cisneros (Hinojosa, min. 54); Areso, Ardanaz (Valdo min. 73), Toni; y Laborda.
Goles: 1-0, min. 3: Víctor García; 2-0, min. 18: Kike Pérez; 3-0, min. 35: Doncel; 3-1, min. 85: Toni; 4-1, min. 90+3: Stiven Plaza.
Árbitro: García Arriola, del colegio vasco, asistido en las bandas por López Baitrago y Pérez Balboa. Amonestó a los locales Miguel y Marcos André y a los visitante Cisneros, Cabrera, Ardanaz, Hinojosa y Toni.
Incidencias: Partido correspondiente a la primera jornada del grupo II de Segunda División, disputado en Los Anexos ante unos 500 espectadores.