El defensor del Real Valladolid aseguró que el equipo está «recuperado anímicamente» y que cada partido será una «final»
El Real Valladolid se ejercitó en la mañana de este jueves a puerta cerrada con la mirada puesta en el partido del domingo ante el Getafe. La principal novedad de la sesión fue Joaquín, que pudo reincorporarse con sus compañeros con normalidad. Por el contrario, Luismi, Stiven Plaza y Antoñito se entrenaron al margen del grupo para seguir con su proceso de recuperación.
Tras el entrenamiento, Nacho fue el encargado de atender a los periodistas en la sala de prensa. El lateral zurdo señaló que el equipo ya está «recuperado anímicamente» y que va a afrontar cada partido «como una final». «Sabemos que el Getafe es un equipo correoso y que sabe a lo que juega, pero intentaremos beneficiarnos de esa intensidad y que caiga de nuestro lado», añadió.
El lateral, que vio el partido ante el Sevilla desde la grada por acumulación de tarjetas, declaró que Moi «hizo muy buen partido» y que, aunque es verdad que él está «jugando un poco más», será el míster el que finalmente «decidirá».
En un momento complicado de la temporada, el ‘22’ pidió el apoyo de los aficionados para revertir la situación. «Necesitamos a la afición porque son parte de nosotros y con su apoyo será todo más fácil», explicó.
El blanquivioleta también reconoció que los resultados están pasando factura. «Mentalmente nos está costando un poco más, porque al final partidos que se te ponen de cara te acaban empatando y eso te va mermando», declaró. A pesar de ello, el defensor ha aclarado que sabían que iban a «sufrir» a la par que explicó que deben estar «preparados para lo que venga».
El partido del próximo domingo traerá consigo la vuelta de uno de los grandes artífices del ascenso, Jaime Mata. Nacho ha explicado que intentarán que tanto él como «todo el Getafe» tengan «su peor día» para poder así «ganar». «La salvación pasa por recuperar las sensaciones. Que cada uno haga lo que tiene que hacer y los resultados positivos llegarán», aseguró.
En esa misma línea, el zaguero apoyó los planteamientos de Sergio. «El míster, cuando prepara los encuentros, tiene las ideas claras, pero es verdad que cada partido es un mundo», aseveró. Al rival lo analizó como un equipo al que le gusta la «intensidad» y señaló que arriba tienen jugadores que pueden «desequilibrar» el partido. Por ello, la clave pasa por «estar más activos» que los azulones.
Cada vez son menos los partidos que quedan y los equipos ya tienen sus objetivos definidos. El madrileño calificó como «difíciles» a todos los rivales, independientemente de si se están «jugando por Europa o por el descenso». «Para el espectador la liga se está poniendo muy bonita, pero para los equipos no tanto«, afirmó con una pequeña sonrisa.
Por último, valoró la situación del equipo a la hora de afrontar los partidos, especialmente cuando los rivales tratan de explotar sus puntos débiles. Nacho considera que deben estar «concentrados» para no sucumbir y cometer errores. «Cuando nos meten muchos centros al área, sufrimos. Tenemos que luchar cada balón como si fuese el último del partido e intentar solucionarlo lo mejor posible», concluyó.
