El guardameta del Real Valladolid pasa por uno de sus mejores momentos demostrando sobre el césped su gran estado de forma

El Real Valladolid entrenó en la mañana de hoy viernes, tras la victoria de ayer ante el Levante. Los blanquivioletas se han ejercitado en Los Anexos en una sesión de recuperación y con un ojo puesto en la enfermería, tras contar con varias ausencias. Entre ellos, se encuentran Óscar Plano, tras confirmarse que será baja durante tres semanas, Moyano, con molestias musculares, y Toni con un fuerte golpe en la muñeca derecha. Además, Joaquín y Verde siguen al margen del grupo y están descartados para el encuentro de este domingo.
Tras el entrenamiento, Jordi Masip ha comparecido ante los medios de comunicación. El cancerbero pasa por un gran momento y, ante el Levante UD, volvió a demostrar en el terreno de juego su gran estado de forma. «Personalmente estoy contento por lo que estoy haciendo. Hay que ir a más, no nos podemos relajar, y yo voy a seguir trabajando para aportar mi granito de arena», comentó.
La pasada noche, pese a su buena actuación, los blanquivioletas tuvieron un partido complicado donde consiguieron remontar al Levante para conseguir la primera victoria de la temporada. «Tuvimos que remontar, el equipo hizo un buen trabajo y estamos contentos para seguir trabajando y tener buenos resultados», señaló el catalán.
La victoria ante el el conjunto granota ha ayudado al equipo a «coger más confianza» y a «seguir trabajando» de cara a los siguientes duelos y a sobreponerse ante las adversidades. «Hemos tenido partidos que han sido duros y ayer fue una muestra más de que el equipo sabe sobreponerse y así fue», respondió.
El conjunto visitante consiguió adelantarse en el marcador con un «gol de estrategia», pero, a pesar de esa desventaja en el marcador, Masip aseguró que «estaba tranquilo porque el equipo estaba teniendo ocasiones e iban a llegar más». «Estaba confiado en el que el equipo podía remontar», agregó.
Con todo, está siendo un inicio de temporada difícil, en buena medida porque los goles no llegaban hasta la pasada jornada en Vigo. No obstante, el guardameta cree que «el equipo está dando la cara» y que no merecía perder los partidos en los que cayó.
Dejando atrás lo sucedido en el arranque de la Liga, el Real Valladolid ya tiene puesta la mente en el partido del domingo. «No jugamos en casa y el Villarreal es un gran equipo, al que le gusta tener el balón y con grandes jugadores; veremos lo que plantea el míster a partir de mañana [por el sábado]. Tenemos poco tiempo, pero nos adaptaremos a ello», arguyó, a pesar de una baja tan importante como la de Óscar Plano.