Desde el clásico “¿Tienes una entrada?” hasta el maravilloso “Yo siempre creí”, ha habido expresiones que hemos repetido hasta la saciedad
Cuando uno repite un acto varias ocasiones, de manera sistemática, este deja de ser eso, un acto puntual, y pasa a convertirse en una costumbre. Pues bien, estos días, o más bien estas últimas semanas, ha habido unas cuantas frases que se han convertido en auténticos hábitos en la ciudad de Valladolid. Varias expresiones que, casi sin darnos cuenta, se han convertido en palabra del Señor cada vez que salía la conversación del posible ascenso blanquivioleta.
Sí, y es que cuando algo se nos incrusta en el cerebro no hay manera de hacerlo salir. Esa frase termina por deslizarse hasta la boca y la decimos, la repetimos y la volver a cacarear para que quede clara. Esta es la lista de las diez más escuchadas en estos días de euforia y felicidad:
1. “¿Tienes/me puedes conseguir una entrada?”: El clásico entre los clásicos. Cerca de 11.000 socios han sido susceptibles de escuchar la frasecita de marras en cada uno de los diferentes partidos en los que el Real Valladolid ha hecho promoción para llevar acompañantes al fútbol. Los resultados para conseguirlas o no fueron completamente dispares, claro.
2. “Ahí va Hervías a tirar la falta, ojo que la marca”: Fue casi por casualidad. Comenzó marcando uno, siguió otro… y el resto es historia. Goles como churros, que se dice, en el momento adecuado. Como es lógico, y visto el percal, cada vez que el ex del Oviedo se plantaba con un balón delante del área rival, la expresión era inevitable.
3. “Todavía no hemos ascendido, no faltemos al respeto al Numancia”: Los cabreos por este asunto han sido constantes desde el momento en el que terminó el partido en Los Pajaritos y hasta que se confirmó el ascenso. Cada vez que alguien hablaba de la celebración o del papel del Real Valladolid en Primera la temporada que viene (benditas redes sociales), enseguida era reprendido por algún hater, con más o menos razón.
4. “¡Qué injusticia! El club lo ha hecho fatal con el tema entradas”: Efectivamente, otro motivo de queja ha sido la de las colas para conseguir las dichosas entradas de promoción, sobre todo en el caso del que fue el último choque del año en Zorrilla. Fueron muchos los que se quedaron sin tickets… y por tanto muchos susceptibles de soltar la frase.
5. “Si te dicen esto hace dos/tres meses…”: Quizá el ganador de toda esta lista. Y es que todos los hemos pensado y, por tanto, comentado con el compañero de al lado. Quién nos lo iba a decir…
6. “¿Que no va a haber celebración en la Plaza Mayor? Vaya desastre”: Circunstancias de la vida. El Real Valladolid nunca llegó a tener opciones reales de ascenso en los últimos años, desde que se celebra el multitudinario torneo de pádel en la Plaza, con lo que nunca se había planteado de verdad el tener que celebrar en otro sitio.
7. “A mí España/el Mundial me da igual mientras ascienda el Real Valladolid”: Otro de los grandes clásicos. Aquí se juntan los tiempos convulsos de la Selección con el buen momento pucelano. Y es que siempre ha habido preferencias. ¿A quién quieres más, a papá o a mamá?
8. “Yo siempre creí”: No podía faltar, el clásico cuñado por excelencia equiparable al «si es que te lo dije». Hay quienes lo dicen más en serio, otros en un tono más jocoso. Unos también con más fundamentos, otros simplemente para subirse al carro. Pero la cuestión es que la frase se ha escuchado mucho, casualmente en las zonas más propicias para ello como las barras de cualquier bar.
9. “A mí me da igual que Mata se vaya si conseguimos el ascenso”: Lo comido por lo servido, habrá pensado alguno. Ya nos preocuparemos de buscar a otro delantero que nos marque más de treinta goles la próxima temporada. Total, de estos tenemos en Valladolid todos los años, ¿no?
10. “Qué pedazo de central es Calero”: Es lo que se llama dar en el clavo. Dar el do de pecho justo en la recta final, cuando más gente está con los ojos puestos en el equipo, y encumbrarse como una de las referencias del Real Valladolid. Desde luego, el central encontró su mejor momento en el mejor momento, valga la redundancia, y la gente ha sabido reconocérselo.
¿Se te ocurre alguna más?